Jessica
Arrendale, quien recibió un disparo en la cabeza, protegió a su bebé al meterla
a la taza del baño y protegerla con su cuerpo, según su familia
ATLANTA,
20 de septiembre.- Mientras una joven madre agonizaba, su último acto fue
salvar a su bebé, al meterla a la taza del baño y protegerla con su cuerpo
contra las balas.
Jessica
Arrendale, de 33 años, es considerada una heroína por sus seres queridos al
pensar en todo momento en la seguridad de su niña de seis meses, inclusive
después de haber recibido un disparo en la cabeza.
La
joven mama residente de Smyrna, Georgia, fue atacada por su pareja, el padre de
la niña, quien estaba alcoholizado, según Teresa Ionniello, la madre de
Jessica, reportó el NY Daily News.
La
pelea ocurrió el pasado sábado por la noche cuando los dos regresaron de una
cena y Antonie Davis, de 30 años, se puso agresivo. Sosteniendo a su bebé,
Jessica intentó defenderse con un bat de béisbol, pero Antonie se lo quitó.
El
hombre golpeó a su mujer en varias ocasiones con el bat, tras lo cual Jessica
corrió a esconderse en un baño.
Antonie,
un exintegrante de la Marina, tumbó la puerta del baño con el bat de beisbol,
sacó un rifle de asalto y le disparó a Jessica en la cabeza.
Le
disparó y la policía no sabe cómo pero ella volteó su cuerpo y cayó al
revés", dijo Teresa a una estación de radio local. En vez de caer en el
piso, Jessica lanzó a su bebé a la taza del baño y la cubrió con su cuerpo.
Luego el hombre se suicidó.
La
bebé fue encontrada 13 horas después cuando la policía irrumpió en la casa. La
niña tenía una herida en la cabeza, que las autoridades creen que fue causada
por el bat de béisbol.
Teresa
afirma que su hija se comportó como una heroína, al dedicar hasta su último
suspiro en salvar a su niña.
(EXCELSIOR/
REDACCION/ 20/09/2014 16:25)
No hay comentarios:
Publicar un comentario