SILAO,
Gto., (apro).- Esta mañana fueron presentados en audiencia pública ante el juez
de sistema oral dos de los presuntos atacantes de la reportera Karla Janeth
Silva, detenidos el pasado jueves 11.
Los
abogados defensores de ambos indiciados solicitaron una prórroga para recabar
algunos testimonios y otras pruebas, pues argumentaron que habrían sido
detenidos de forma arbitraria, antes de que fuera solicitada la orden de
aprehensión en su contra.
Ambos
indiciados fueron presuntamente contratados por el director de Seguridad
Pública de Silao, Nicasio Aguirre Ruiz, para amenazar y golpear a la periodista
de El Heraldo el jueves 4 en las oficinas del periódico.
Aguirre
Ruiz y otro supuesto cómplice que participó en la agresión se encuentran
prófugos.
El
procurador Carlos Zamarripa informó ayer que, como resultado de las
investigaciones, el Ministerio Público solicitó la noche del miércoles la orden
de aprehensión en contra del director de Seguridad Pública, a quien implicó
como responsable de ordenar la golpiza a la comunicadora, junto con otros tres
cómplices.
La
orden de captura fue otorgada por el juez de control de oralidad la mañana del
jueves, destacó el procurador, quien en ese momento dijo haber acreditado que
Nicasio Aguirre “ordenó a estas personas, las contrató” para atacar a Silva
Guerrero.
Incluso,
el titular de la PGJE dijo que tenía los elementos suficientes para que fueran
concedidas las órdenes de captura, por lo que no había sido necesario tomar la
declaración a los dos detenidos, y que eso ocurriría cuando estuvieran ante el
juez de control.
Sin
embargo, según lo que expusieron los defensores de los dos presuntos agresores
ante el juez José de Jesús Delgado Ojeda, éstos en realidad fueron capturados
desde el martes por agentes de la Policía Ministerial.
Más
aún, el equipo de abogados que se presentó a defender a los dos indiciados
argumentó que los familiares de uno de ellos –identificado como Joaquín Osvaldo
Valero– habían presentado una denuncia por su desaparición días antes de que se
diera a conocer su detención por parte de la PGJE.
Por
ello, solicitaron al juez duplicar el plazo para definir la situación jurídica
de Valerio Garnica y el otro detenido, cuyo nombre se pidió mantener en reserva
por parte del juez gracias a las garantías que brinda el sistema oral.
Los
abogados solicitaron tiempo para efectuar entrevistas a los dos detenidos y a
un grupo de testigos –en su mayoría familiares de ambos–, así como para conocer
los nombres de los agentes ministeriales que los detuvieron.
También
requirieron el reporte de la solicitud de la orden de aprehensión al juzgado, y
hasta los informes médicos para saber si había rastros de las lesiones que se
infligieron a la reportera.
En
respuesta, el juez Delgado Ojeda concedió la prórroga del plazo y decretó que
la audiencia para imputar los cargos a los detenidos por parte de la Fiscalía
que representa a Karla Silva y a su compañera Adriana Elizabeth Palacios
continuará el martes 16 por la mañana.
Sin
embargo, el juez descartó que los defensores tomaran nuevas declaraciones a los
inculpados y tampoco que indagaran sobre la solicitud de las órdenes de captura
o los agentes que participaron en la misma.
Tampoco
aceptó que se levantara un nuevo examen médico, luego de que la fiscal Yolanda
Ramírez aclaró que todo ese material ya se encontraba en la carpeta de
investigación iniciada en la PGJE.
La
funcionaria advirtió que los defensores de los inculpados sólo pretendían
dilatar el proceso.
En
la audiencia hubo al menos dos recesos.
Uno
de ellos solicitado por la propia fiscal, en virtud de que Karla Silva, quien
acudió junto con Adriana Palacios, se sintió mal y debió abandonar la sala por
unos minutos.
Al
aplazarse la continuación de esta audiencia para el martes 16, el abogado
Miguel Ángel Oviedo –uno de los tres defensores particulares de los inculpados–
dijo a los medios que aunque no puede sostener que hubo una detención
irregular, se ocupará de reunir elementos para probarla.
“Sus
familiares (de uno de los detenidos) hicieron una denuncia de que hubo una
desaparición de él; estamos solicitando (el expediente de esa denuncia) para
corroborarlo y acreditarlo”, señaló.
Los
dos detenidos permanecerán recluidos en el penal de Irapuato.
“ME QUITARON PARTE DE LA PIEL”: KARLA
Antes
de salir del juzgado, Karla Silva conversó brevemente con los numerosos
representantes de los medios que asistieron a la audiencia.
Sentada
en una de las oficinas del juzgado, frente a cámaras y grabadoras, la joven
reportera se dijo tranquila por los avances que hay en el proceso, pero
solicitó públicamente a las autoridades que se mantengan las medidas de
protección brindadas a ella y su familia.
Acto
seguido señaló la lesión en la frente que le fue causada por los golpes
propinados por sus agresores antes de amenazarla por sus notas, herida que luce
varias suturas:
“Uno
de los (golpes) más considerables fue la herida en esta parte de la frente… me
quitó parte de mi piel, tuve mucho sangrado… varios golpes en la cabeza”, y
luego extendió los brazos y mostró dos enormes moretones. “También tengo en las
piernas”, narró.
Además,
confirmó el diagnóstico clínico realizado el lunes, en el sentido de que padece
un edema cerebral (inflamación), “eso limita mi visión”.
A
pesar de lo padecido, aseguró que seguirá ejerciendo el periodismo. “Desde
luego que sí, a mí me interesa la parte de seguir siendo un punto importante
para la sociedad, todos nosotros somos portavoces de la gente que busca
expresarse”.
Luego,
dijo que este es un momento “de que haya unión, de que destaquemos como gremio,
que busquemos que se nos respete, espacios dignos para realizar nuestro
trabajo, Todo ello depende de todos nosotros”, acotó.
“No
es necesario que ocurran situaciones de esta índole para que como gremio
alcemos la voz –expresó antes de salir acompañada de su papá–. Pero es un
momento oportuno para decir: ‘Aquí estamos, tenemos voz, tenemos derechos,
aunque no podemos olvidar que también tenemos obligaciones”.
(PROCESO
/ VERÓNICA ESPINOSA/12 DE SEPTIEMBRE DE 2014)
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