Advierte
Insight Crime sobre diversificación del crimen organizado hacia el robo de
camarón; preocupa también se dispare el 'arsenal changuero' en época de veda
MAZATLÁN.- Grupos
armados van ahora tras el "oro blanco" en que se ha convertido el
camarón, al dispararse el precio en el mercado internacional.
Mientras duró la
temporada de pesca se reportaron por lo menos 14 asaltos con violencia en el
Pacífico mexicano, aunque con mayor incidencia en la región centro-norte de
Sinaloa.
Ahora el camarón se
encuentra en veda y el temor entre los productores pesqueros es que la codicia
despierte una ofensiva de los furtivos, como nunca antes.
Este miedo parece
tener fundamentos, pues de acuerdo al centro de investigación Insight Crime, de
Estados Unidos, el ataque contra los barcos camaroneros se puede vincular con
la diversificación del narcotráfico, luego de la captura de varios de sus
líderes y la probable fragmentación del Cártel de Sinaloa.
"Piratas
fuertemente armados han estado despojando de las capturas de camarón alrededor
de la costa mexicana del Pacífico, quizás es obra de que los pistoleros de los
cárteles que deben desplazar sus actividades o es un signo de la interrupción
de los embarques de cocaína hacia Estados Unidos", señala Insight Crime en
uno de sus análisis sobre la situación de inseguridad en México.
Sólo un ejemplo de
cómo el crimen amplía su portafolio para no depender exclusivamente de las
drogas, al extenderse a actividades como la extorsión, el secuestro y ahora, al
parecer, también el robo de camarón.
El autor del
artículo, Seth Robbins, evidencia lo que en Sinaloa es voz popular: que de
acuerdo a su modus operandi los ladrones del preciado crustáceo pertenecen a
una banda bien organizada, con uso de armas largas, lanchas con motores de alto
poder y facilidades de movilidad y comercialización por tierra.
Siguiendo con el
reporte, es poco probable que estos criminales se especialicen en el atraco a
los barcos, más bien provienen del tráfico de sustancias ilícitas.
"Las
organizaciones criminales usualmente mueven la cocaína vía marítima por rutas
establecidas tanto en las costas del Caribe como del Pacífico, usando lanchas
rápidas, submarinos, yates y botes de pesca, o una mezcla de todos ellos",
agrega el texto.
Así, para Insight
Crime no es casual que este tipo de violencia en sitios pesqueros se registre
de forma frecuente en Colombia, Nicaragua, Honduras y Panamá, parte del
recorrido de los traficantes hacia la Unión Americana, como el mercado
consumidor más activo del mundo.
Mientras tanto, en
el ámbito local los pescadores han sufrido una de las peores embestidas de los
piratas, con pérdidas millonarias e impunidad a tope, pues a pesar de que se
han interpuesto denuncias ante la PGR, ningún caso se ha resuelto.
PUNTOS CRÍTICOS
Señalada por los
armadores, la zona crítica de los asaltos a barcos camaroneros se ubica entre
Altata, en Navolato, y Agiabampo, al sur de Sonora.
A pesar de que la
región conflictiva se tiene bien identificada, los campos pesqueros por donde
puede salir el camarón robado carece de vigilancia, acusan productores.
Desde hace años, los
asaltos a barcos camaroneros son una constante cada temporada. Sin embargo, las
últimas 10 se había presentado un patrón de uno a tres asaltos, y en la más
reciente (2013-2014) fuero catorce, una cifra récord.
(NOROESTE/ Sibely
Cañedo/ 31-03-2014)
No hay comentarios:
Publicar un comentario