A la firma Isolux Corsán parecen no afectarle las acusaciones
de corrupción, tráfico de influencias y hasta una inhabilitación en
México. Esta empresa obtuvo su primer contrato importante del sexenio
para Pemex Refinación de 156 millones de pesos
En 2009 el IMSS le otorgó la construcción de un hospital rural en Ixtepec,
Puebla, por el que les pagaron 97 millones de pesos
Mientras los escándalos siguen y en Latinoamérica el proceso a sus
irregularidades aún no concluye, en México la empresa estrena el sexenio
con privilegios
La
constructora española Isolux Corsán fue favorecida en México con obras
millonarias realizadas en Nuevo León, Coahuila, Veracruz, Aguascalientes
y Tabasco.
Además conserva desde hace 45 años, la concesión en las carreteras de
libramiento a Xalapa, entre Perote y Banderilla y en un tramo de 92 km.
de la autopista Monterrey-Saltillo. En ambos casos las cuotas son
elevadas y consideradas muy por encima de otras concesiones nacionales.
Sus contratos durante los sexenios panistas con la CFE sumaron 561
millones de pesos, y las obras fueron entregadas tarde, por lo que
recibieron sanciones que, según registros actuales, no se han
liquidado.
Con presencia en latinoamérica en obra pública, siempre con
resultados polémicos, la empresa ahora se suma el primer contrato de
Pemex Refinación en el sexenio, por 156 millones de pesos, apenas
firmado la semana pasada.
El Grupo Isolux tiene un largo historial, ventilado en medios, que
incluye sobornos en Sudamérica, tráfico de influencias, más una
inhabilitación en México por entregar información falsa a la CFE.
Nada de ello le impidió ganar el primer contrato importante de esta
administración para la reubicación de las líneas de transmisión de
energía en la Refinería de Tula, en Hidalgo.
La convocatoria se publicó en el Diario Oficial de la Federación el
27 de diciembre y resultó ganadora Isolux de México en una propuesta
conjunta con Construcciones e Instalaciones del Noroeste.
El contrato se firmó el 23 de abril pasado. La paraestatal informó
que la obra consistirá en reubicar las líneas de 400KV, que actualmente
cruzan el predio. Las moverán hacia el perímetro en los tramos
Tula-Querétaro y Tula-Poza Rica.
Con este contrato, Isolux traspasa la barrera del sexenio
calderonista, que le trajo ganancias millonarias y le acarreó denuncias
por presentación de información falsa, altos costos en las autopistas
que les concesionaron, y cancelación de un contrato por modificar las
condiciones.
Favoritos de la CFE
Isolux de México fue registrada como empresa nacional en febrero de
1991, pero sus contratos importantes comenzaron en 2006, durante el
último año foxista.
En enero de 2006 Isolux comenzó a ganar contratos en conjunto con el conglomerado italo-argentino Techint.
Fueron beneficiarios de una licitación para retirar e instalar cable
nuevo en 24 enlaces ópticos de 14 estados para la CFE. Les pagaron 46
millones de pesos.
Dos meses más tarde, Isolux ganó otro contrato por 20 millones de
pesos con CFE, para poner en servicio un generador en Guerrero.
En esos mismos días, otra vez asociado con Techint, Isolux ganó 49
millones de pesos por el retiro e instalación de cable de guarda en
nueve estados. En abril ganaron otra licitación por 63 millones de pesos
más, para construir e instalar siete líneas de transmisión de voltaje
en ocho estados.
En octubre de 2006, ganaron un contrato por 174 millones de pesos y
en diciembre de 2008, una licitación internacional con CFE por 209
millones de pesos para instalar dos líneas de transmisión de voltaje. En
julio de 2009 les impusieron una multa de 118 millones de pesos “por el
retraso en la fecha programada de aceptación provisional”.
CFE no cobró la garantía a pesar de que Isolux tuvo retrasos en los
trabajos, por lo que la Auditoría determinó un posible daño patrimonial a
esa dependencia por 109 millones de pesos, que no se cobraron hasta el
momento en que se terminó esa revisión.
Grandes contratos con Fox y Calderón
Un mes antes de que terminara la administración Fox, Isolux comenzó a
trabajar con otro socio: Siemens, que actualmente se encuentra en un
juicio contra Pemex por acusaciones de sobornos en la remodelación de la
refinería de Cadereyta, en Nuevo León.
La unión ganó una licitación por 39 millones de pesos para construir e
instalar cinco líneas de transmisión de voltaje en Aguascalientes y
Guanajuato.
El primer año de gobierno de Calderón fue débil para la compañía
española, ya que sólo obtuvo una adjudicación directa por 364 mil pesos
para la Línea de Transmisión Cárdenas II en Villahermosa, Tabasco.
En mayo de 2009 el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) le
otorgó la construcción de un hospital rural en Ixtepec, Puebla, por el
que les contrataron 97 millones de pesos.
Su gran obra del sexenio con el gobierno federal fue para Pemex
Refinación, ya que ganaron un contrato por 604 millones de pesos para la
construcción de una planta de recuperación de azufre en la refinería de
Salamanca, en Guanajuato.
Inhabilitados, continúan engañando
Los contratos más jugosos para la compañía estuvieron en el interior
del país, mayormente en la construcción de la autopista
Monterrey-Saltillo y el Libramiento de Xalapa, en Veracruz.
En octubre de 2006 se abrió en Veracruz un concurso público para la
construcción del Libramiento de Xalapa, que daría la concesión por 30
años de la autopista Perote-Banderilla, además del Libramiento.
El proyecto ganador, del que Isolux tenía la mitad de las acciones,
fue adjudicado en diciembre de 2007. Contenía 59 kilómetros de obra y
costaría 2 mil 860 millones de pesos, en un financiamiento compartido
entre el gobierno estatal, la empresa española y la Secretaría de
Comunicaciones y Transportes (SCT).
De acuerdo con el fallo del concurso hecho público, la obra debía
comenzar en abril de 2008 y ser entregada en marzo de 2010. Fue
inaugurada por Felipe Calderón en julio del año pasado, dos años después
de la fecha límite.
Al anunciar el inicio del Libramiento, dijeron que costaría 2 mil 860
millones de pesos. Durante la construcción, cada informe federal y de
la compañía mostraba cifras de inversión disímiles.
Constructora a prueba de escándalos
A la firma Isolux Corsán parecen no afectarle las acusaciones
de corrupción, tráfico de influencias y hasta una inhabilitación en
México. Esta empresa obtuvo su primer contrato importante del sexenio
para Pemex Refinación de 156 millones de pesos
Ahora, con la obra terminada, dicen en su portal web que costó 625
millones de euros, 9 mil 875 millones de pesos al tipo de cambio actual,
es decir, tres veces más de lo que estipulaba el fallo de la
licitación.
Isolux cambió también varias veces su estimación de cuándo
inaugurarían la obra en Veracruz. La aplazaron de “finales de 2009”
hasta “principios de 2011”, según sus informes.
La compañía alegaba que los retrasos fueron por la falta de permisos
para los derechos de vía, lo que debía conseguir el estado de Veracruz.
Pero, aunque desde 2008 el gobierno veracruzano anunció que habían
pagado 243 millones de pesos para la liberación de los derechos de vía,
en febrero de 2009 el fideicomiso que administró la construcción anunció
que habían sido apenas 219 millones.
La carretera fue inaugurada en julio del año pasado y la compañía
anuncia en su portal que la concesión no será por 30, sino por 45 años.
Hasta ahora ha tenido críticas reiteradas sobre sus precios, que han
llevado a que la propia compañía levante una encuesta entre los usuarios
por la subutilización de la autopista.
Por los dos tramos del Libramiento, de casi 30 kilómetros cada uno,
los usuarios de automóvil deben pagar 221 pesos, el equivalente a casi a
7 pesos por kilómetro.
Tanto la compañía como las autoridades locales de la SCT afirman que
el costo se debe a la complejidad de la obra, pero los sobrecostos
también han sido una crítica recurrente entre los usuarios de la
autopista Monterrey-Saltillo.
Monterrey-Saltillo cara y defectuosa
En 2006, el Grupo ganó la licitación para construir los 92 kilómetros
de la autopista Monterrey-Saltillo. La obra debía costar 2 mil 800
millones de pesos y estar terminada en 2009.
Durante la construcción, la Procuraduría Federal de Protección al
Ambiente encontró que la empresa no cumplía con el Manifiesto de Impacto
Ambiental ni tenía el Estudio Técnico Justificativo, ya que no había
conseguido la firma de los pobladores para que les otorgaran los
derechos de vía.
Luego, fue denunciada por irregularidades con 25 trabajadores,
quienes no habían sido afiliados al Seguro Social y fueron despedidos
injustificadamente.
La obra fue detenida y no pudieron retomarla hasta que pagaron una multa por compensación ambiental.
Desde su inauguración, ha sido criticada por desperfectos en la
construcción, que fueron visibles desde su primer año de servicio,
cuando varias de sus partes debieron cerrarse luego del paso del huracán
Alex.
Tan solo en el primer año de servicio, la tarifa del peaje aumentó de 39 a 63 pesos.
En febrero de este año, Reporte Indigo publicó que también la concesión de esta carretera se extendió de 30 a 45 años.
“La construcción de esta autopista de peaje presentó retrasos, de
hasta un año, por la incapacidad de la SCT de liberar a tiempo el
derecho de vía”, afirma el texto publicado por este diario.
Estas incapacidades llevaron a que Banobras entregara a la compañía
516 millones de pesos por “retrasos en la obra”, que modificara el plazo
de la concesión y hasta la Ley de Caminos y Puentes y Autotransporte
Federal para avalar estas decisiones.
Mientras los escándalos siguen y en Latinoamérica el proceso a sus
irregularidades aún no concluye, en México la empresa estrena el sexenio
con privilegios y la concesión del primer contrato de Pemex
Refinación.
En medio de la controversia, comprobación de sobornos, funcionarios
encarcelados por recibirlos y obras retrasadas y sobrevaludadas, en este
país sí tiene cabida y continúan como habían estado en los gobiernos
panistas de Fox y Calderón: trabajando para México.
Carreteras asignadas a Isolux Corsán
Monto total de las obras cooncesionadas a la constructora.
$9,875 mdp Libramiento Xalapa, Veracruz
Concesionada a 45 años
Cobro: $221.00 pesos por 59 km.
Costo original licitado: $2,860 mdp
$3,316 mdp Monterrey-Saltillo
Concesionada a 45 años
Cobro: $63.00 pesos por 92 km.
Costo original licitado: $2,800 mdp
Sobornos, sanciones y cárcel
La licitación para el Libramiento de Xalapa, en Veracruz, se abrió
una semana antes de que el Diario Oficial de la Federación publicara que
todas las dependencias debían abstenerse de firmar contratos con
Isolux.
La inhabilitación consistió en tres meses de no firmar contratos y
una multa por 75 mil pesos. La causa fue que la compañía había
presentado información falsa a la CFE.
De acuerdo con un reportaje publicado en marzo de 2011 por el diario
Imagen de Veracruz, Isolux participó en una licitación con CFE alegando
que no había sido sancionada en los cinco años anteriores, pero esto era
falso.
Los expedientes a los que tuvo acceso el diario mostraron que, en un
contrato celebrado con CFE en 2002 para la construcción de dos líneas de
transmisión en los estados de Chihuahua, Aguascalientes y Zacatecas,
Isolux recibió una multa de 126 mil pesos por retrasos en la entrega de
la obra.
En febrero de 2010, un mes antes de que se diera el banderazo de
inicio del Libramiento de Xalapa, Isolux pagó a Hacienda 88 mil pesos de
multa para que la sacaran del padrón de proveedores y contratistas
sancionados.
Además de esta sanción, en noviembre de 2004 el Grupo Isolux Corsán
había sido multado en España por omisiones en los pagos de impuestos del
ejercicio fiscal 2000.
La sanción le fue revocada por la Audiencia Nacional española en
diciembre de 2010, años después de que había ganado millones de pesos
con dependencias mexicanas.
En Argentina y El Salvador
Constructora a prueba de escándalos
A la firma Isolux Corsán parecen no afectarle las acusaciones
de corrupción, tráfico de influencias y hasta una inhabilitación en
México. Esta empresa obtuvo su primer contrato importante del sexenio
para Pemex Refinación de 156 millones de pesos
En 2009 el IMSS le otorgó la construcción de un hospital rural en Ixtepec,
Puebla, por el que les pagaron 97 millones de pesos
Mientras los escándalos siguen y en Latinoamérica el proceso a sus
irregularidades aún no concluye, en México la empresa estrena el sexenio
con privilegios
Cuando la compañía Isolux aún no formaba la unión con Corsán-Coviam,
en 1999, ganó con dos empresas españolas una concesión para ampliar una
planta potabilizadora en El Salvador.
Aunque el gobierno salvadoreño les otorgó seis prórrogas para
concluir el contrato, el consorcio no terminó la obra, que fue
inaugurada finalmente en mayo de 2002.
Años después, la Fiscalía salvadoreña acusó al presidente del
consorcio, Joaquín Alviz, de haber ganado la concesión mediante
sobornos, que sumaron alrededor de 60 millones de pesos, y que fueron
hechos al administrador nacional de acueductos del país centroamericano,
Carlos Perla y varios de sus funcionarios.
Perla fue condenado a 15 años de prisión por fraude, ya que firmó una
certificación de obra terminada, a pesar de que estaba a la mitad. El
consorcio que integraba Isolux cobró 228 millones de pesos por esa
certificación, aunque durante el escándalo se deslindó de Alviz.
En marzo de 2011, la Audiencia Nacional de España negó a El Salvador
una petición de que extraditaran a Alviz a ese país para ser juzgado por
556 millones de pesos de sobornos y asociaciones ilícitas.
La resolución estuvo basada en que El Salvador no se comprometió a
entregar a ciudadanos de ese país que tuvieran juicios pendientes en
España.
Cuando este juicio estaba en proceso, en 2007, Isolux Corsán ganó una
licitación en Argentina para construir la Central Termoeléctrica a
Carbón Río Turbio, en la provincia de Santa Cruz.
En 2010, tres legisladores de oposición argentinos denunciaron que el
gobierno había pagado un sobreprecio de 174 por ciento por la obra, en
comparación con plantas similares en Chile y Estados Unidos.
Greenpeace los secundó con más datos: también Isolux había recibido
un anticipo por mil 724 millones de pesos por la obra, meses antes de
que presentaran los estudios de impacto ambiental. La planta se licitó
por 4 mil 491 millones de pesos, pero ha terminado costando más del
doble, es decir, 9 mil 715 millones.
La denuncia incluyó correos electrónicos que involucraban a Isolux
con el pago de sobornos y llevó a la dimisión del ministro de
Planificación argentino, Ricardo Jaime.
En el reportaje publicado por Imagen de Veracruz en 2011, Juan Carlos
Villalongo, director de campañas de Greenpeace Argentina, dijo que
Isolux es una empresa mediana en España y que en Argentina han ganado
licitaciones “aunque existen contra ellos muchas denuncias de
corrupción.
El ambientalista afirmó que los nexos políticos de Isolux en el país
sudamericano fueron tanto con el expresidente Néstor Kirchner como con
su esposa Cristina, actual presidenta.
Sus vínculos empresariales en esa región remiten al grupo italiano
Techint, al que calificó como “muy vinculado al poder, con facilidad
para ganar licitaciones”.
En enero de este año, el diario argentino La Nación afirmó que no
había carbón suficiente para administrar a la planta de Río Turbio, que
debe iniciar trabajos este verano aunque fue inaugurada por Cristina
Kirchner desde julio de 2011, durante su campaña para la reelección.
“Le digo algo, es más barato que la central queme lingotes de oro que
el carbón de Río Turbio”, dijo el ingeniero Emilio Martínez al diario.
En entrevistas realizadas a ingenieros de la planta, quienes son
ahora jubilados, explicaron que la central termoeléctrica construida por
Isolux no puede ser abastecida por la mina de carbón de Río Turbio.
Varios funcionarios del gobierno argentino desmintieron al diario y
siguieron defendiendo la obra, que aún no ha representado un peso de
beneficio a los contribuyentes argentinos.
(REPORTE INDIGO/ Lunes 1 de julio de 2013)
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