LAS MUJERES SOMOS BLANCO CONSTANTE DE LA CREATIVIDAD INSULTANTE: MARCHA DE LAS PUTAS

Discurso de Posicionamiento

  

"Nos denomina zorras, perras, sex symbol, putas, se nos compara con ganado, con un buffet. Las mujeres vivimos día a día el ser objetos de una creatividad publicitaria que nos ha estereotipado como superficiales, objetos sexuales o amas de casa abnegadas". Destaca el posicionamiento de la marcha

 

La creatividad del ser humano no tiene límite. Aun cuando se trata de degradar, humillar e insultar el talento creativo alcanza alturas inesperadas. Las mujeres no somos sólo testigos, sino blanco constante de esta creatividad insultante que nos denomina zorras, perras, sex symbol, putas, que nos compara con ganado, con un buffet. Las mujeres vivimos día a día el ser objetos de una creatividad publicitaria que nos ha estereotipado como superficiales, objetos sexuales o amas de casa abnegadas; estereotipos que quieren encerrarnos en el cielo de abnegación caracterizándonos como los modernos ángeles del hogar; o hundirnos en el infierno pintándonos como sensuales demonios que engañan, persuaden y arrastran al pecado disimulado en la imagen de autos de lujo, bebidas, perfumes.

No somos ángeles del hogar, ni putas, zorras, demonios u objetos sexuales. Somos mujeres libres. Libres para exigir respeto por nuestras opiniones, nuestra forma de vestir, nuestra forma de ser. Libres para decidir cómo vivimos nuestra sexualidad, qué hacemos con nuestros cuerpos, si deseamos o no la maternidad. Libres para elegir, hablar, exigir, y soñar.

Soñar con un lugar donde podamos caminar libres del miedo a las palabras que humillan e insultan disfrazadas de piropos. Soñar con una sociedad que no se dispute el derecho a decidir por nosotras sin tomarnos en cuenta. Soñar con un mundo donde los golpes, los gritos, las miradas no agredan nuestros cuerpos, no lastimen nuestra dignidad, no hieran nuestro ser. Soñar con un mundo donde el largo de una falda o la profundidad de un escote no se considere una invitación a violentar nuestros cuerpos… soñar y exigir que nuestros sueños se vuelvan realidad.

Somos mujeres soñadoras, sí, pero también somos mujeres luchadoras y nuestra lucha es incluyente. Hoy marchamos por todas y todos, hoy exigimos respeto por cada mujer que ha sido humillada e insultada con los piropos; hoy decimos ¡basta!, a nombre de cada mujer y niña que se encoje ante los puños que se levantan frente a ella, a nombre de aquellas a las que la violencia silenció para siempre. Hoy marchamos a favor de la no violencia y el respeto. No pedimos condescendencia, no queremos promesas de papel, ni palabras que se lleva el viento y el tiempo borra de las memorias. Queremos hechos.

Somos y seremos mujeres golpeadas mientras exista una mujer golpeada. Somos mujeres abusadas mientras haya en el mundo una mujer víctima de abuso. Somos putas, seremos putas cada vez que una mujer sea etiquetada con esta palabra… y no nos quedaremos calladas, levantáremos la voz, gritaremos, exigiremos, explicáremos, demostráremos a cada paso y con cada acto que no queremos ni estamos dispuestas a ser receptoras pasivas de los golpes, gritos abusos, e insultos.

La marcha de las putas no es un insulto a la sociedad, ni una falta de respeto a las personas que la miran pasar. No es un mal ejemplo para los niños y jóvenes que hemos encontrado al paso. La marcha de las putas es una caminata por la libertad y el respeto, es una muestra de que no estamos dispuestas a bajar la mirada y apretar el paso ante cada insulto callejero; que no nos encogeremos temerosas antes los puños que se alcen para golpearnos; que no guardaremos silencio ante los gritos que agreden e insultan; que no permitiremos que nos traten como objetos. 

Salimos a la calle a reunirnos para retomar los espacios públicos para nosotras las mujeres y queremos, exigimos seguridad para caminar en paz, sin piropos, sin insultos y sin espectaculares que nos denigren.

Queremos un espacio digno porque tenemos derecho a vivir libre de violencia. ¡Basta de complicidad institucional! Como ciudadanas, reclamamos a las autoridades todo este tiempo de omisiones, de pasividad. Reclamamos un mayor presupuesto para atender y erradicar la violencia contra las mujeres.  Necesitamos armonización legislativa para sancionar la publicidad sexista en cualquier nivel de gobierno y que se exija a los responsables la reparación  del daño que han causado en nosotras con campañas que reposicionen a las mujeres como sujetas de derecho.

Del Instituto Sonorense de las Mujeres y el Gobierno del Estado reclamamos la lentitud y la falta de sensibilidad para atender este reclamo, pues sólo se quedaron conformes con el cambio en el reglamento de Publicidad Exterior en Hermosillo y no se preocuparon por realizar acciones en los 71 municipios restantes para tener impacto a nivel estatal y garantizarnos la no repetición.

Autoridades escuchen y atiendan nuestras voces, es su obligación.

¡Queremos campañas  a favor de las mujeres como reparación del daño que permitieron!

¡Una educación por la igualdad libre de violencia machista y estereotipos!

¡Por niñas y niños sensibles y amorosos!

¡Por una sociedad justa, incluyente y respetuosa!

¡Viva la Libertad! ¡Viva la Igualdad! ¡Viva la Paz!

(DOSSIER POLÍTICO/ Comunicado /  2013-06-30)