miércoles, 27 de enero de 2016

SUBPROCURADOR PELEA POR CONCESIÓN FEDERAL EN VALLE DE GUADALUPE


A pesar de las advertencias que científicos y productores de vino han hecho sobre la llegada del fenómeno “El Niño” a Baja California y las consecuencias del saqueo indiscriminado de arena en la zona de Francisco Zarco en el Valle de Guadalupe, la máquina retroexcavadora y cribadora no para de trabajar en ambos lados del Arroyo Guadalupe.

Por un extremo está el extranjero William Raymond Benton Moreno, cuya concesión está a nombre de su madre, de nacionalidad mexicana, quien surte a la compañía Servicios Pétreos, S.A. de C.V., propiedad de los hermanos Jorge y Víctor Valdés.

Del otro lado del puente está Calafia Sand, cuyo apoderado legal es Arturo Pérez Gutiérrez, quien durante 20 años ha sacado material pétreo del otro lado del puente del arroyo. Ninguno de los dos tiene permiso renovado, pero están amparados.

 Un tercero en disputa es el subprocurador de Justicia de Zona Ensenada, Marco Chavarría López, quien tiene una concesión justo donde la empresa de Benton extrae arena, en una zona federal administrada por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), misma que fue cercada por el funcionario para delimitar el terreno a su cargo.

 A inicios de noviembre, ZETA informó sobre una serie de irregularidades en la entrega de autorizaciones para realizar esta actividad, donde las compañías constructoras resultan las únicas beneficiadas porque el costo anual por concesión es de mil 200 pesos cuando las ganancias por día pueden llegar hasta 350 mil pesos, n perjuicio de los pobladores y productores del Valle.

En esa región existe una riqueza importante para los constructores porque, además de arena, hay agua como en ningún otro sitio de la Ruta del Vino, justo en el acuífero de Guadalupe. 

 LOS INTERESES DEL SUBPROCURADOR

Al respecto, Chavarría López respondió con documentos en mano que sí es concesionario de 6 mil 950 metros cuadrados de zona federal en el arroyo, mismos que le fueron cedidos por un “conocido” en 2013, y cuya superficie está destinada solo para agricultura. El suelo de ese predio es en apariencia infértil, pero se sabe que en esa área es donde más agua hay a lo largo de la Ruta del Vino.

Él insiste en que no está interesado en vender arena porque el permiso que recibió de CONAGUA lo ha estado cambiando de uso “agrícola” a “servicios” (ornato), y hace unos meses volvió a solicitar una modificación para cultivar en esa zona.

A su decir, decidió extender su concesión a 3.5 hectáreas más en ambos lados del arroyo, y si CONAGUA autoriza esta solicitud, su terreno medirá más de cuatro hectáreas.  

“Pero jamás para extraer arena del lugar, yo no tengo autorización para sacar productos pétreos de ahí”, aclaró el subprocurador con insistencia en las oficinas estatales. Fuentes cercanas a ZETA aseguraron que Chavarría López tiene propiedades dentro del poblado y que la intención es construir con la arena una vinícola, así como un salón de fiestas a nombre de José Ángel León; versión que también negó el fiscal en Ensenada.

“Yo no tengo una propiedad, o sea, en especial yo… no tengo. Sí hay un pequeño desarrollo que están llevando a cabo pero no es algo mío (a su nombre), sino una sociedad de producción rural, ¡pero esto es totalmente distinto!”, alegó.

Asimismo, se dijo en contra de la extracción de arena, que sus trámites los realiza por medio de un abogado y que el pago anual asciende a 5 mil pesos.

“No tengo problemática jurídica con ningún particular, con ninguna sociedad, ni averiguación previa, ninguna problemática y ningún juicio”, se defendió.

“Si algo está ocurriendo hay que hacerlo de conocimiento de CONAGUA, porque no quiero tener problemas de que alguien está sacando arena de un lugar que tengo en resguardo, es necesario dar parte incluso a la PGR. No quiero que se malinterprete, yo no tengo constructora, ni ocupo material pétreo para construir”, insistió.  

 Chavarría López adquirió el terreno con una cesión de derechos de forma gratuita, cuando no era subprocurador de Justicia del Estado.

 “Fue hace tres años, y yo entré en noviembre”. No descarta en un futuro, cuando deje el cargo de servidor público, dedicarse a la producción de vino: “Si todos lo hacen, por qué yo no”, contestó sonriente y en tono de inclusión. 

 SCT TRAE OBRA EN EL VALLE

Otras fuentes que pidieron anonimato aseguran que con la extracción de arena las empresas buscan el negocio completo, desde concesión para instalar una empresa concretera hasta facilidades para concursar obras de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en el Valle.

Es un hecho que la SCT construirá puentes a lo largo de la carretera El Sauzal a Tecate, ya que el martes 12 de enero, por medio de un comunicado oficial, la Secretaría anunció estas millonarias obras de infraestructura.  

EXTRACCIÓN DE ARENA Y LLUVIAS

Con las pasadas lluvias, el nivel de agua en el cauce del Arroyo Guadalupe aumentó y a su paso se llevó, como se hace costumbre, los caminos de arena que los pobladores acondicionaron para cruzar hacia la delegación Francisco Zarco.

 Vecinos de la zona comentaron que tardó poco más de un día que el agua desapareciera y se volvieron a trazar los cruces, como ocurrió en octubre de 2015, cuando una creciente que bajó de la sierra, arrasó con vías de comunicación, maquinaria y hasta una casa rodante.

 Uno de los residentes de la delegación, cuya vivienda se encuentra en las inmediaciones del arroyo, aseguró que cuando hay lluvias monitorea el nivel de agua ante la posibilidad de que se desborde.

 Como antecedente recordó que hace 30 años las lluvias intensas sepultaron decenas de casas que se encontraban cerca del canal.  

Por parte de CONAGUA no hay avances en la revocación de permisos, solo el delegado del organismo, Eduardo Ledesma Romo, fue separado de su cargo mientras las empresas extractoras siguen trabajando bajo amparo.

En total son nueve los titulares de las concesiones para la extracción de arena en arroyos de Ensenada, mientras que no hay una cifra oficial de los furtivos que saquean este material, cuyo costo por metro cúbico es de entre 50 a 150 pesos en el mercado.   

En el caso del Arroyo Guadalupe, son dos empresas las que extraen arena sin permiso, pero protegidas con amparos federales, muy a pesar de que esta actividad tiene un impacto ecológico negativo y que la sobreexplotación puede derivar en el desbordamiento de los cauces, afectando a más de 500 familias que residen en Francisco Zarco. 

LOS VITIVINICULTORES

La última reunión solo entre productores se realizó la noche del miércoles 13 de enero y, sin quitar el dedo del renglón, insisten en que la autoridad federal debe detener el saqueo de arena.

Desde noviembre el sector productor inició reuniones con las autoridades de SEMARNAT, CONAGUA y PROFEPA para determinar las acciones a seguir en cuanto a este tema; hasta el momento los encuentros no han rendido frutos.

Por otro lado, algunos productores manifestaron que la salida de Ledesma Romo influyó en que se haya detenido el diálogo. 

 EL FURTIVISMO APREMIA

El delegado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), Alfonso Blancafort Camarena, reconoció que los extractores de arena trabajan sin parar, pero hasta el cierre de edición su oficina no ha autorizado otro estudio para determinar otra zona donde sacar arena, “siempre ha sido la misma, tenemos que cuidar mucho lo que tenga que ver con la recarga de agua y la población”.

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) está avisada sobre estos actos ilícitos y solo le ha limitado a multar a quienes de manera informal siguen extrayendo material pétreo.

 Blancafort Camarena respondió que de noviembre a la fecha no han recibido solicitud alguna de autorización en materia de impacto ambiental para la extracción de arena en el Valle de Guadalupe, por lo que desconoce quién cercó el canal.

“Tampoco tenemos antecedente alguno sobre la disputa de alguna concesión a nombre de una norteamericana”, reiteró en alusión a la concesión que explota Benton Moreno.

 Advirtió que con la temporada de lluvias que se esperan este año será importante ver el comportamiento del agua, eso significa que habrá más volumen de arena que recargan los cauces y, por lo tanto, habrá más empresas que busquen hacer negocio con la arena.

“Tenemos que ser cuidados en las evaluaciones que hacemos como autoridad, porque de manera sistemática, sin estar bien informados en materia ambiental, nos pueden afectar quienes estén realizando esta actividad; por eso hay que fundamentar la resolución”, opinó respecto a las acciones legales, como el amparo, que han emprendido los concesionarios.

 Como siempre, dijo, es el verdadero problema, “el gran enemigo será el furtivismo, el aprovechamiento de recursos naturales, donde entran otras instancias gubernamentales, ya que hay negocios que les compran este material a los ilegales”. 

En las lluvias de la segunda semana de octubre de 2015, la creciente de agua que bajó de la sierra destruyó los caminos alternos en Francisco Zarco, llevándose maquinaria de uno de los concesionarios que estaba en el cauce, además de escombro, y dejó cortadas líneas de comunicación y suministro de agua y electricidad.

Autoridades de Protección Civil estatal mantienen la alerta para poner especial atención en ese arroyo que hace 30 años se desbordó el cauce y sepultó decenas de viviendas.

  NO DEBE PERMITIRSE EXTRACCIÓN, DICEN INVESTIGADORES

El investigador de Ciencias de la Tierra del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE), Humberto Mendoza Garcilazo, informó que no debe permitirse la extracción, ya que disminuye la capacidad de recarga de los acuíferos.

 Agregó que la arena actúa como un tipo de “esponja” para captar agua y llevarla hacia capas más profundas, y que estos canales son lo que  finalmente juntan todas las escorrentías que caen a lo largo y ancho del Valle.

La falta de arena en los arroyos puede captar más volumen de agua y trasladarla con mayor velocidad, lo que provoca que no logren penetrar en el subsuelo.

 Fue lo que ocurrió con las lluvias de octubre, que al llegar la creciente de agua de la sierra, ésta llevaba velocidad y arrasó con una casa rodante, desechos y maquinaria, en vez de hundirse.

 “No pudo penetrar en el subsuelo por no contar con la esponja de arena superficial”, citó Mendoza.  

SOLICITUDES DE AMPLIACIÓN DE CONCESIÓN POR PARTE DE CHAVARRÍA LÓPEZ  EN ARROYO GUADALUPE PARA CULTIVAR 6 mil 960 metros  (autorizadas en 2013) 5 mil 888   (en proceso) 11 mil 300 18 mil 078.


(SEMANARIO ZETA/ Reportajez/  BCS  / Lunes, 18 enero, 2016 08:25 PM)

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