Pensylvania, EU.- Cerca de 10 mil personas se reunieron la
noche del sábado frente a la ventana del dormitorio de una niña
estadounidense a punto de morir, para cantarle sus villancicos
preferidos, y cumplieron así el último deseo navideño de la menor.
Laney Brown, una niña de ocho años de edad de Pennsylvania -en mayo diagnosticada con leucemia mieloide aguda- fue enviada a casa desde el hospital la semana pasada después de que los médicos determinaran que no podían hacer nada más por ella. Le dieron dos semanas de vida.
Como querían complacer al máximo a la niña, los padres de Laney abrieron una cuenta en Facebook en apoyo a su hija, para que su último deseo fuese compartido por otros habitantes de la localidad. Su deseo era simple: escuchar villancicos por última vez en su vida.
El mensaje, que exhortaba "Villancicos para Laney", se extendió por todas partes, y cerca de 10 mil personas se reunieron frente a la ventana de Laney para cantarle sus villancicos preferidos la noche del sábado.
Para hacerse una idea de la colosal movilización, basta decir que la localidad natal de Laney, West Reading, cuenta apenas con unos cuatro mil habitantes.
"Las diferentes historias que su madre ha publicado regularmente, mostrando su fuerza, su valentía y su sentido del humor es algo desgarrador", señaló una de las presentes, Megan McGee. "Lo único que quería eran villancicos y pudimos hacerlo", agregó.
La niña falleció ayer miércoles 25 de diciembre.
Laney Brown, una niña de ocho años de edad de Pennsylvania -en mayo diagnosticada con leucemia mieloide aguda- fue enviada a casa desde el hospital la semana pasada después de que los médicos determinaran que no podían hacer nada más por ella. Le dieron dos semanas de vida.
Como querían complacer al máximo a la niña, los padres de Laney abrieron una cuenta en Facebook en apoyo a su hija, para que su último deseo fuese compartido por otros habitantes de la localidad. Su deseo era simple: escuchar villancicos por última vez en su vida.
El mensaje, que exhortaba "Villancicos para Laney", se extendió por todas partes, y cerca de 10 mil personas se reunieron frente a la ventana de Laney para cantarle sus villancicos preferidos la noche del sábado.
Para hacerse una idea de la colosal movilización, basta decir que la localidad natal de Laney, West Reading, cuenta apenas con unos cuatro mil habitantes.
"Las diferentes historias que su madre ha publicado regularmente, mostrando su fuerza, su valentía y su sentido del humor es algo desgarrador", señaló una de las presentes, Megan McGee. "Lo único que quería eran villancicos y pudimos hacerlo", agregó.
La niña falleció ayer miércoles 25 de diciembre.
(ZOCALO/ Agencias / 26/12/2013 - 07:54 AM)
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