EL "ARRIMÓN": EN BUSCA DEL PLACER SIN COMPROMISO

'Froteurismo' - Encuentros en el límite de la legalidad

En Facebook se han creado grupos en donde comparten sus experiencias en vagones del STC Metro y del Metrobús, además de hacer citas con gente que busca la misma aventura.

México.- Nayeli se ha aventurado a tener dos encuentros froteuristas (como se denomina a la filia) de manera consensual en un vagón del Metro, con el objetivo de hallar placer esporádico sin ningún tipo de compromiso.

"La primera ocasión que me presté a un arrimón fue sin planearlo previamente: era una tarde de octubre, en la Línea 1, mientras el Metro sufría retraso por un tren descompuesto y venía llenísimo". 

Un desconocido se paró detrás de ella, al principio parecía que el joven, de unos 20 años, no tenía opción, pues no cabía ni un alma más en el vagón; sin embargo, poco a poco se fue acomodando y ella no supo qué hacer, "era una especie de miedo y curiosidad que me agradó, pensé que no podía ocurrir nada más de unos roces, así que comencé a disfrutarlo, además el chico era de mi agrado, pues era bastante varonil".

La siguiente oportunidad que Nayeli tuvo para tener un encuentro en el Sistema de Transporte Colectivo, fue luego de compartir su experiencia en un grupo en Facebook llamado "Arrimones en el metro DF", alguien que leyó su relato le envió su número celular y comenzaron a charlar mediante la aplicación whatsapp. Acordaron verse un domingo en la estación Observatorio de la Línea 1 del Metro, abajo del reloj a las 20:00 horas, los dos llevarían una prenda roja y un listón del mismo color amarrado en la muñeca de la mano derecha; ambos fueron puntuales.

Al reconocerse y sin hablar mucho, se subieron en el penúltimo vagón, que iba semivacío, lo que impidió que el encuentro se realizara con totalidad, pues la poca gente que iba a bordo se percató inmediatamente y comenzó a ver a la pareja despectivamente.

"Ahí fue donde aprendí que para una cita así se necesita que el vagón esté completamente lleno para que la gente no se dé cuenta, o que vaya en su totalidad vacío para que la pareja pueda tener privacidad."

Esa noche, tras el intento fallido, el acompañante de Nayeli le pidió continuaran en un hotel, a lo que ella se negó.

"Si tengo esta clase de encuentros es para divertirme, pero también para ahorrarme los peligros de quedar embarazada o con una enfermedad de transmisión sexual, así que no puedo permitirme el riesgo de acostarme con un extraño", aclaró.

Y es que la enfermera de 29 años afirma que el tiempo que le absorbe su trabajo le impide tener una relación formal, así que se presta a estos encuentros para tener placer sin compromisos con un toque de adrenalina, "y por qué no, debo aceptarlo, soy una mujer normal aunque un poco exhibicionista".

De esa manera como comenzó a tener esos encuentros consensuales en vagones del Metro.

Así como Nayeli, hay cientos de personas que forman parte de grupos virtuales que recientemente han emergido y donde se incita al froteurismo, conocido como arrimón, dentro del transporte público de la Ciudad de México, principalmente en el Metro y en el Metrobús.

Las anécdotas son escritas por cibernautas de manera anónima y compartidas a través de mensajes directos a los administradores de la comunidad; éstos a su vez los comparten en la comunidad sin nombrar a su autor, para que los integrantes del grupo los lean e interactúen. La sección de comentarios, también sirven para conectarse con personas con el mismo interés y hasta para concretar un posible encuentro en algún vagón con solo dejar el número telefónico.

Para el Distrito Federal existen alrededor de 10 distintas comunidades virtuales con más de mil integrantes cada uno: "Me gustan los arrimones en el Metro y en el Metrobús", "Arrimones en el Metro del DF", "Arrimones en el Metro del DF, Mexibús y transporte público", "Mujeres que permiten los arrimones en el Metro DF", "Arrimones manoseos Metro DF", "Arrimones DF (encuentros reales y seguros)", "Arrimones y algo más en Neza y DF", "Arrimones en el Metro, camiones DF y Estado de México".

La variedad

El froteurismo puede tener tres tipos de encuentros: el no consensuado, el casual consensuado y el consensuado previamente.

El primero es considerado como un abuso sexual, que ya es un delito, ya que consiste en acosar a una persona, regularmente una mujer; en este caso, el froteurista busca tener contacto sexual con alguna parte de su cuerpo.

En estos casos, el acosador actúa sin la aprobación de la víctima y regularmente la sorprende cuando ésta se encuentra de espaldas.

El segundo es el encuentro casual consensuado, que puede surgir cuando el froteurista identifica a una persona y al buscar contacto, esta no pone oposición pues le causa placer.

Mediante estas páginas en Facebook se asiste a las personas que deseen este tipo de encuentro orientándolas a identificarse mutuamente dentro del vagón con una prenda que sea como señal.

El encuentro consensuado y premeditado regularmente comienza en los comentarios de las comunidades en Facebook. Los interesados acuerdan una hora y la estación para subirse juntos al vagón o simplemente publican las líneas y horarios que frecuentan.

La acción

Si bien las comunidades virtuales sirven como un anecdotario colectivo para que los froteuristas compartan sus experiencias, también facilitan los encuentros sexuales dentro del transporte público entre personas que así lo deseen; para esto, los usuarios han implementado una serie de códigos entre el que destaca usar un listón rojo en la mano derecha, primordialmente en las mujeres, para indicar que están dispuestas a un arrimón dentro del vagón del Metro.

Para encuentros heterosexuales consensuales, estas comunidades virtuales recomiendan usar el penúltimo vagón del convoy; el último será reservado para homosexuales.

De acuerdo con las comunidades en Facebook, las líneas más utilizadas para el froteurismo son la 1, 2 y 3, principalmente en las estaciones de transbordo y en las horas pico, como lo son Hidalgo y Balderas, ya que la multitud facilita los arrimones.

(MILENIO/ 23/11/2013 01:17 AM)