Una quinceañera y una
cena familiar fueron arruinadas por un conductor fantasma, que por conducir con
exceso de velocidad provocó un fuerte choque entre dos familias, que sin
deberla ni temerla tuvieron que pagar las consecuencias
César Bolaños
NUEVO LAREDO.- Fernando y su esposa embarazada se habían alistado para
acudir a una quinceañera, mientras que Socorro con su hijo y nieto regresaban
del centro comercial donde compraron todo para la cena de esa noche.
Ninguno de los dos imaginó lo que iba a pasar; jamás pensaron que chocarían
de frente por culpa de un imprudente, del cual no supieron ya que al momento de
ver el impacto, huyó.
Doña Socorro circulaba por la calle Independencia tranquilamente, casi al
llegar a la Eva Sámano un coche se metió en contra y aunque Socorro trató de
sacarle la vuelta, el golpe fue inevitable, chocaron de frente.
El susto fue grande, ya que al momento del golpe, Fernando dejó a su esposa
embarazada en el carro y salió corriendo del auto, lo que desconcertó a los
testigos, pero después supieron qué era lo que había pasado.
Otro carro que venía bajando el puente de la Eva Sámano a exceso de
velocidad golpeó por alcance a Fernando y lo desvió para que se metiera en
contra por la Independencia, por ello fue que bajó corriendo, ya que intentaba
ver o alcanzar al que le pegó.
Mientras en la camioneta el susto era mayor, ya que el nieto de doña
Socorro se abrió la frente, aunque se observaba aparatoso, sólo necesitó de
tres puntadas y no pasó a mayores.
Jamás supieron quién ni qué carro fue el que ocasionó el impacto entre
estos dos; sin embargo, Fernando tuvo que pagar los daños por haber sido el que
se metió en contra de la calle y dejó casi inservible la camioneta de la señora
Socorro.
Al final no pasó a mayores, ninguno de los dos se explica cómo fue que
ocurrió todo, cómo es que en un abrir y cerrar de ojos sin tener nada que ver,
son víctimas de otros que para evitar responsabilidades, prefieren huir como
cobardes.
EL MAÑANA/ César Bolaños/
10 de Febrero 2013)
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