México, DF.-
En el último día para impugnar la reforma laboral, diferentes organizaciones
sindicales se lanzaron a los tribunales federales del país para presentar
demandas de amparo.
Cientos de cajas con
miles de recursos de trabajadores de diversos sindicatos del país, inconformes
por lo que consideran un “atentado” a sus derechos laborales, fueron apiladas
en las sedes del poder judicial en los estados.
Sin embargo, al
menos 10 jueces federales en tres estados se negaron en los últimos días a
suspender provisionalmente la aplicación de las reformas a la Ley Federal del
Trabajo, impugnadas por decenas de sindicatos y miles de trabajadores.
De acuerdo con
registros del Consejo de la Judicatura Federal consultados por Reforma, cinco
jueces de distrito en materia de trabajo con sede en la Ciudad de México,
cuatro en Guadalajara y uno más en Cuernavaca han rechazado de manera unánime
la petición de los quejosos de suspender “los efectos y consecuencias” de la
reforma mientras se tramitan los juicios.
Los jueces han
argumentado que la reforma, publicada el 30 de noviembre en el Diario Oficial,
es un hecho consumado, amén que lo más frecuente es que se niegue la suspensión
en litigios en los que solo se impugna una ley por su mera entrada en vigor.
Desde la semana
pasada, los juzgadores han estado admitiendo a trámite los amparos, en los que
básicamente se impugnan alrededor de 50 de los más de 200 artículos que fueron
modificados, agregados o derogados de una ley que no había sido tocada por el
Congreso desde la década de los 70.
Los temas regulados
por las nuevas normas incluyen: regulación a subcontratación y outsourcing y a
empleo de mexicanos en el extranjero; contrataciones sujetas a prueba o periodo
de capacitación; despidos por actos de violencia, falta de honradez, acoso
sexual, entre otros.
También la
regulación de trabajo a menores, de trabajadores eventuales del campo y en
minas, así como de los juicios ante juntas de conciliación por prestaciones de
seguridad social.
La admisión a
trámite no implica que los argumentos de inconstitucionalidad serán estudiados.
Fuentes judiciales
consideraron que los amparos podrían ser sobreseídos (desechados) en muchos de
los temas, pues los jueces podrían considerar que la reforma solo afectará a
los trabajadores hasta que les sean aplicadas en situaciones concretas.
Los sindicatos que
han promovido amparos incluyen a los de Trabajadores del Seguros Social,
Caminos y Puentes Federales, de la Industria Nuclear y Mexicano de
Electricistas; de empresas privadas, los de las firmas Nissan Mexicana, Kone
México, Especialidades e Industrias Químicas y el diario La Jornada, así como
sindicatos gremiales de varias industrias y ramos comerciales de Jalisco.
La Coordinadora
Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) promovió ayer un amparo
colectivo. Los maestros regidos por la Ley Federal de los Trabajadores al
Servicio del Estado pueden alegar que la reforma laboral les causa perjuicio,
porque ésta última es de aplicación supletoria a la ley burocrática.
Los amparos serán
concentrados en los juzgados primero y segundo auxiliares en el DF, que en el
pasado han lidiado con litigios masivos, como el de la Ley del ISSSTE en 2007,
y las sentencias que dicten estos jueces serán revisadas por los tribunales
colegiados en materia de trabajo del Primer Circuito.
El tema podría
llegar a la Suprema Corte de Justicia, pero sólo si los jueces estudian los
argumentos de fondo de los quejosos o si la propia Corte decide ejercer su
facultad de atracción.
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