Luego de que Guzmán Loera fuera
extraditado a Estados Unidos, se desconoce quién sea la cabeza del cártel
México.- Recientemente han
dado a conocer imágenes exclusivas del momento en el que el narcotraficante
mexicano Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, fue presentado ante la Corte Federal
del Distrito Este de Nueva York.
La cadena estadounidense de
noticias CBS NEWS compartió un video, donde se observa a “El Chapo” Guzmán
intercambia palabras con algunos agentes de la Administración para el Control
de Drogas (DEA por sus siglas en inglés).
También es posible apreciar
que el capo de la droga mantienen en todo momento los ojos muy abiertos, como
si tuviera una reacción de miedo y sorpresa.
El gobierno de Estados Unidos
le imputa un total de 17 cargos a “El Chapo”, entre los que destacan el dirigir
una empresa criminal, tráfico de armas y lavado de dinero.
El líder del cártel de
Sinaloa fue trasladado el viernes en la mañana a un juzgado de Nueva York,
donde se declaró no culpable de los cargos que le expusieron y quedó preso sin
derecho a fianza.
Hubo un momento de silencio
en la sala de juzgados en Brooklyn momentos antes de que Guzmán entrara. Se le
veía aturdido y vestía una camisa azul oscuro, pantalones del mismo color y
zapatos deportivos.
SE FUE DE MÉXICO
Joaquín "El Chapo"
Guzmán pasó su último día en México el jueves 19 de enero de 2017, un día antes
de que Donald Trump jurara como presidente de los Estados Unidos.
Autoridades mexicanas
difundieron el video de la cámara de seguridad de la celda del capo en el penal
federal de Ciudad Juárez, Chihuahua, en donde se observa su expresión al ser
notificado de su extradición a los Estados Unidos.
El jefe del cártel de Sinaloa
viste el uniforme reglamentario, con calcetas y sandalias. También se observa
que duerme con un antifaz negro.
Las autoridades federales de
Estados Unidos lo mantienen en una prisión de alta seguridad en Manhattan, en
la ciudad de Nueva York, que ha sido descrita como más severa que la de
Guantánamo.
De acuerdo con varios
informes de prensa, Guzmán es mantenido en el Centro Correccional
Metropolitano, que tiene una de las medidas de seguridad más estrictas entre
las prisiones en Estados Unidos.
Guzmán es mantenido en esa
prisión luego de que fuera extraditado desde México para ser presentado ante
una corte federal del condado de Brooklyn, donde enfrenta 17 cargos por
actividades criminales que se extendieron por más de tres décadas.
De acuerdo con una memoria
publicada por Uzair Paracha, condenado por proporcionar apoyo al grupo
terrorista Al-Qaeda, esta prisión de Manhattan tiene condiciones menos
hospitalarias que el centro de detención militar de Guantánamo.
El diario The New York Times
asentó que los reclusos alojados en las celdas de máxima seguridad se han
quejado de condiciones tan aislantes que algunos la culpan por sufrir
deterioros de la vista.
La cárcel, abierta en 1975,
tiene alrededor de 795 presos. Aquellos considerados más peligrosos están
alojados en unas seis celdas en un ala conocida como 10 Sur, donde están
recluidos en régimen de aislamiento y se les prohíbe comunicarse entre ellos.
En esas celdas las luces
están encendidas 23 o 24 horas al día, e incluso la ranura en cada puerta la
mantienen cerrada, lo que significa que los reclusos ven poco más allá de su
celda solitaria, de acuerdo con los recuentos del Times.
Los guardias pueden ver el
interior de estas celdas a través de una cámara dirigida a la ducha y otra por
encima del inodoro o la cama, según las memorias de Paracha.
¿QUIÉN SE QUEDA CON EL CÁRTEL?
El Cártel de Sinaloa de
Joaquín El Chapo Guzmán quizá pueda sobrevivir a la extradición de su jefe,
pero un grupo rival muy bien armado podría intensificar su guerra para
apoderarse de su imperio.
Los analistas suelen comparar
al cartel de Sinaloa, con su multimillonario negocio expandido por el mundo,
con una corporación internacional lo suficientemente fuerte para soportar la
pérdida de su CEO.
La extradición de Guzmán el
jueves a Estados Unidos "es una gran victoria moral, pero no impactará al
cartel de Sinaloa", dijo Mike Vigil, ex funcionario de la DEA, la agencia
antidrogas de Estados Unidos.
Las tres veces que Guzmán ha
estado encarcelado en México —se escapó dos veces y fue recapturado hace un
año—, el que se ha hecho cargo del negocio, según Vigil, es su socio Ismael El
Mayo Zambada.
HEREDARÁN SU TRONO
Con la recaptura de Joaquín,
El Chapo, Guzmán, el Cártel de Sinaloa se fragmentó y la violencia en esa
entidad fue en aumento.
La disputa es entre los
propios familiares de Guzmán Loera, quienes buscan el control total de una de
las organizaciones con mayor extensión a nivel mundial.
Hasta hace pocos años era el
cártel que se mantenía con una estructura bien cimentada evitando pleitos
internos, pero ante la ausencia de uno de los fundadores, los dos grupos
principales iniciaron una lucha por el poder.
Las facciones están
encabezados por Aureliano Guzmán Loera, El Guano, que reclamó el liderazgo a
Iván y Alfredo Guzmán Salazar.
Ataque en La Leche. Foto: Youtube
Por herencia, los hijos de El
Chapo se perfilaban como los líderes, pero El Guano, su tío y hermano del capo,
es quien actualmente tiene mayor poder al interior del cártel, de acuerdo con
fuentes del gabinete de seguridad consultados.
Aureliano, siempre bajo la
sombra de El Chapo, con su recaptura buscó el poder, lo que lo llevó a
distanciarse de sus sobrinos y de Ismael El Mayo Zambada, otro de los
fundadores de la organización criminal.
El Guano es identificado por
las autoridades como más violento y que tiene el control mayormente en La Tuna,
La Palma y El Nogalito.
A partir de la emboscada a un
convoy militar en Culiacán, el 30 de septiembre de 2016, con un saldo de cinco
militares muertos, las autoridades confirmaron la información con la que
contaban: El Guano desplazó a los hijos de Joaquín Guzmán.
Disputan el poder. En
diciembre de 2015, Aureliano Guzmán libró su captura por parte de las Fuerzas
Armadas, luego de haber sido identificado en un rancho familiar. Sin embargo,
hoy es uno de los objetivos principales de las autoridades federales.
Hijos de El Chapo. Foto: Twitter
IGUAL QUE PABLO ESCOBAR
Es imposible que no se
compare a El Chapo Guzmán con Pablo Escobar, luego de que ambos controlaran el
tráfico de drogas en sus respectivos países, así como el peligro en el que
pusieron a México y Colombia.
Sin embargo, detrás de todo
lo que mostraron los dos capos narcos en sus actos, ambos tuvieron siempre el
mismo miedo: terminar sus días en una prisión de Estados Unidos.
Escobar, líder del cártel de
Medellín y máximo capo narco de la historia, logró esquivar ese deseo de las
autoridades norteamericanas. Pero terminó pagando con su vida el 2 de diciembre
de 1993.
"Preferimos una tumba en
Colombia a una cárcel en Estados Unidos" decía el capo.
Incluso llegó a conformar el
grupo "Los Extraditables", que se encargó de llevar al extremo la
violencia en el país durante la década de 1980. Murieron periodistas,
candidatos presidenciales, diputados y senadores, y hasta fue tomada e
incendiada la Corte Supremo.
Cuando se vio cercado por el
Gobierno y la Justicia, Escobar finalmente negoció con el Ejecutivo en 1991. El
acuerdo era entregarse a cambio de no ser extraditado. El Gobierno cedió y
ordenó, por decreto, la prohibición para extraditar a sus ciudadanos.
Fiel a su estilo, el líder
del cártel de Medellín no estuvo recluido en una prisión común y corriente.
Estuvo en la cárcel conocida como "La Catedral", donde compartió
celda con sus colaboradores y gozaba de toda clase de lujos.
Pero su detención no duró
mucho tiempo. Ante las constantes presiones de Estados Unidos para que el
gobierno de Colombia extraditara al por entonces narcotraficante más buscado
del mundo, Escobar escapó. Dos años después, cumplió con su palabra. Prefirió la
muerte a una prisión norteamericana. El 2 de diciembre de 1993 fue abatido por
las fuerzas colombianas cuando intentaba escapar de su refugio.
Desde 1997, Colombia retomó
la extradición como una herramienta para combatir al narcotráfico.
Escobar y Guzmán montaron dos
estructuras narcotraficantes que lograron sembrar terror y violencia en
Colombia y México. Ambas llegaron hasta las últimas consecuencias para evitar
su gran temor. Uno de ellos logró esquivarlo, pero pagó con su vida. El otro,
en cambio, no logró evitarlo y ahora deberá rendir cuentas en tierras
norteamericanas donde enfrenta diferentes cargos en seis estados
ÚLTIMOS MOMENTOS EN MÉXICO
"El Chapo" vivió
con ansiedad sus últimos minutos en la celda en el Centro Federal de
Readaptación Social Número 9 de Ciudad Juárez el día de ayer.
"¿Adónde me llevan?,
¿voy al Penal del Altiplano?", fue la consulta que le hizo el líder narco
a los oficiales que fueron en su búsqueda para trasladarlo al aeropuerto de esa
ciudad que lo llevaría a Estados Unidos. Nadie le respondió. La cadena
Univisión logró conseguir los últimos minutos de esa estadía en Juárez.
Allí puede verse a Guzmán con
su saco beige, sus pantalones del mismo color, unas sandalias y medias. Las
manos, en los bolsillos de su chaqueta. Serían los últimos minutos del jefe
criminal en México.
EXTRADICIÓN
El líder del cártel de
Sinaloa, Joaquín Guzmán Loera llegó la noche del jueves al aeropuerto de Long
Island de Long Island y fue trasladado al Centro Metropolitano de detenciones
‘Sunset Park’
La súbita extradición de
Joaquín "El Chapo" Guzmán para juzgarlo en Estados Unidos marca el
final de una era en la que fue el capo de la droga más conocido de México y,
para algunos, un personaje de leyenda.
Pero muchos en México la ven
también como una maniobra calculada con precisión para limitar los costes
políticos del presidente, Enrique Peña Nieto, ya muy impopular debido en parte
a la impresión de que no gestionó adecuadamente los duros comentarios de Donald
Trump sobre México.
En una rueda de prensa el
jueves se preguntó al subprocurador general Alberto Elías Beltrán sobre el
momento de la extradición. El fiscal respondió que el gobierno federal no puede
interferir en las decisiones judiciales.
"Hoy fue resuelto y
nosotros en términos del tratado internacional teníamos que hacer la entrega
inmediata", afirmó.
Sin embargo, los expertos
seguían considerando que el momento del traslado se planificó con cuidado.
"Podría ser una
coincidencia, pero creo que eso es improbable", señaló el analista
mexicano de seguridad Alejandro Hope, señalando que la extradición se produjo
el último día completo de la presidencia de Barack Obama y horas antes de la
investidura de Trump.
"No podían enviarlo
después de que Trump asumiera el cargo porque se habría interpretado como un
tributo", dijo Hope. "Pero quizá querían hacerlo lo bastante cerca
como para que ambos gobiernos, el saliente y el que llega, pudieran sacar algo
de provecho político de esto".
Otros lo vieron como una
recompensa para Obama y un golpe soterrado para Trump, que ha descrito a los
inmigrantes que llegan de México a Estados Unidos de forma irregular como
delincuentes y "violadores", además de prometer que construirá un muro
en la frontera y hará que México lo pague.
"El gobierno mexicano
decidió adelantar el plazo porque no quería que Trump estuviera en la
presidencia cuando lo enviaran", dijo Michael Vigil, ex director de
operaciones internacionales para la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA,
por sus siglas en inglés).
"Querían que Obama se
llevara el mérito. Querían enviar un mensaje a Trump de que no se dejarán
intimidar".
Guzmán salió del país el
mismo día en que las autoridades mexicanas anunciaron conversaciones de alto
nivel en Washington el 25 y 26 de enero. En las negociaciones participarán el
recién nombrado diplomático mexicano Luis Videgaray y miembros del gobierno de
Trump como el secretario de la Casa Blanca, Reince Priebus, el yerno de Trump y
asesor de primer nivel Jared Kushner y el asesor de primer nivel Stephen
Bannon.
El momento elegido también
transmite el mensaje de que México se toma en serio la cooperación contra las
drogas independientemente de quién ocupe la Casa Blanca, dijo Hope.
El senador Miguel Barbosa,
del grupo opositor de izquierdas Partido Revolución Democrática, aprovechó la
extradición para lanzar un ataque a Peña Nieto. El senador afirmó que el
traslado parecía ser la única opción luego de las dos bochornosas fugas de
Guzmán de penales de máxima seguridad.
"No hay que festejar que
el estado mexicano no fue capaz de procesar al mayor delincuente que ha
existido en México y no fue capaz de garantizar su aprisionamiento",
afirmó en un comunicado.
Peña Nieto tiene ahora la
peor tasa de aprobación para un mandatario mexicano desde que se hacen sondeos.
Además de su gestión de Trump, los mexicanos están descontentos por la
corrupción, la creciente violencia del narcotráfico y una reforma del 1 de
enero que provocó subidas de hasta el 20% en el precio de la gasolina.
Andrés Granados, abogado de
Guzmán, acusó al gobierno de intentar distraer la atención del público.
"Lo manejaron
políticamente, para opacar la situación de las gasolinas", afirmó.
"Es totalmente político".
Algunos mexicanos temían que la
extradición del capo a Estados Unidos, donde se le impedirá mantener el
contacto con sus subalternos, pudiera desatar una lucha de poder en el cartel y
más derramamiento de sangre.
"Se van a empezar a
pelear entre todas las bandas que hay, ¿no? Narcotraficantes, a ver quién llega
a ser el número uno", dijo Roberto Lascurain, arquitecto en Ciudad de
México.
Se cree que Ismael "El
Mayo" Zambada, un colaborador de Guzmán, dirige el cartel desde que
"El Chapo" fue recapturado el pasado enero. Algunos analistas creen
que los hijos de Guzmán podrían haber asumido papeles de más importancia.
Los hijos de Guzmán podrían
intentar reclamar el control, lo que "puede ser una negociación sin
violencia o una guerra con ametralladoras", dijo Raúl Benítez, experto en
seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Sin embargo, Vigil predijo
que es improbable que las operaciones del cartel de Sinaloa que dirigía Guzmán
se vean afectadas.
"La mayoría de los
cárteles tienen una estructura vertical, pero... Sinaloa tiene una horizontal
en la que las células operan de manera semiautónoma", dijo Vigil.
"Tienen un equipo
sólido. Tienen a un líder respetado en Ismael 'El Mayo' Zambada".
En Twitter, algunos vieron
motivos para el humor en la extradición de Guzmán el día antes de que Trump
asuma la presidencia de Estados Unidos.
"Envían lo peor, llevan
drogas, son delincuentes", tuiteó Jorge Guajardo, embajador mexicano en
China entre 2007 y 2013, rememorando los comentarios de Trump sobre la
inmigración irregular. "De acuerdo, usted gana. Aquí está el peor que tenemos,
El Chapo".
Con información de: AP, El Universal,
AFP e Infobae
(EL DEBATE /REDACCION/ 25 DE ENERO 2017)
No hay comentarios:
Publicar un comentario