Ernesto Acosta | Rodrigo Flores
Saltillo, Coah.- Luego de
que el abogado Xavier Oléa Trueheart destapó el megafraude en que
incurrió la financiera SEFISE S.A. de C.V. en perjuicio de más de 70
inversionistas –incluidos algunos saltillenses– que denunciaron ante la
Procuraduría General de la República, la empresa desapareció de
Saltillo.
A menos de seis meses de haber abierto sus puertas, SEFISE dejó de atender a sus inversionistas aquí en Saltillo y hasta retiró la razón social bajo la cual operó durante algunas semanas, consiguiendo amarrar millonarias inversiones bajo la promesa de estratosféricos e irreales rendimientos que finalmente no entregó, según lo declarado por Oléa Trueheart, del Despacho Oléa y Oléa que representa a los defraudados.
Zócalo Saltillo buscó ayer miércoles por la mañana al director administrativo y de Finanzas de SEFISE Luis Fernando Villarreal, de quien la recepcionista no supo dar información sobre su paradero, ni siquiera datos sobre la financiera involucrada en la millonaria estafa.
“Aquí no es SEFISE”, confirmó la empleada, quien insistió en que en las oficinas donde operó la financiera desde el 26 de septiembre de 2013, en bulevar V. Carranza 3890, ya opera otra firma denominada Macrofin dedicada al otorgamiento de créditos.
El abogado Xavier Oléa reveló a Zócalo que la financiera está denunciada ante la PGR y la Comisión Nacional Bancaria desde finales del 2013 por fraude contra inversionistas que entregaron ahorros que van desde 500 mil hasta 20 millones de pesos por rendimientos, muy por encima de los que ofrece la banca comercial, e incluso libres de impuestos.
SEFISE del Norte consiguió de sus “brockers” o captadores aquí en Saltillo, inversiones a tasas superiores al 10% mensual. En otros casos, la promesa fue de hasta el 25%, según reveló el despacho Oléa.
Zócalo Saltillo insistió en buscar a Luis Fernando Villarreal nuevamente y la misma empleada volvió a negar su presencia en las oficinas de Macrofin.
El empresario Héctor Horacio Dávila comentó que será difícil que los inversionistas saltillenses recuperen el dinero que les fue estafado pues, dijo, este tipo de empresas defraudadoras regularmente son manejadas por cerebros financieros que aprovechan lagunas de la ley, pero sobre todo la ignorancia de los que invierten.
A menos de seis meses de haber abierto sus puertas, SEFISE dejó de atender a sus inversionistas aquí en Saltillo y hasta retiró la razón social bajo la cual operó durante algunas semanas, consiguiendo amarrar millonarias inversiones bajo la promesa de estratosféricos e irreales rendimientos que finalmente no entregó, según lo declarado por Oléa Trueheart, del Despacho Oléa y Oléa que representa a los defraudados.
Zócalo Saltillo buscó ayer miércoles por la mañana al director administrativo y de Finanzas de SEFISE Luis Fernando Villarreal, de quien la recepcionista no supo dar información sobre su paradero, ni siquiera datos sobre la financiera involucrada en la millonaria estafa.
“Aquí no es SEFISE”, confirmó la empleada, quien insistió en que en las oficinas donde operó la financiera desde el 26 de septiembre de 2013, en bulevar V. Carranza 3890, ya opera otra firma denominada Macrofin dedicada al otorgamiento de créditos.
El abogado Xavier Oléa reveló a Zócalo que la financiera está denunciada ante la PGR y la Comisión Nacional Bancaria desde finales del 2013 por fraude contra inversionistas que entregaron ahorros que van desde 500 mil hasta 20 millones de pesos por rendimientos, muy por encima de los que ofrece la banca comercial, e incluso libres de impuestos.
SEFISE del Norte consiguió de sus “brockers” o captadores aquí en Saltillo, inversiones a tasas superiores al 10% mensual. En otros casos, la promesa fue de hasta el 25%, según reveló el despacho Oléa.
Zócalo Saltillo insistió en buscar a Luis Fernando Villarreal nuevamente y la misma empleada volvió a negar su presencia en las oficinas de Macrofin.
El empresario Héctor Horacio Dávila comentó que será difícil que los inversionistas saltillenses recuperen el dinero que les fue estafado pues, dijo, este tipo de empresas defraudadoras regularmente son manejadas por cerebros financieros que aprovechan lagunas de la ley, pero sobre todo la ignorancia de los que invierten.
(ZOCALO / Redacción /03/04/2014 - 07:37 AM)
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