Los empleados de
Petróleos Mexicanos empezaron a sentir los efectos de la reforma energética
desde antes de su promulgación, ya que el gobierno federal dictó medidas para
adelgazar la nómina de la paraestatal. Por si eso no bastara, una vez consumado
el cambio constitucional la empresa dejó de pagarles a miles de sus trabajadores
en todo el país, y aun a jubilados y pensionados, la quincena correspondiente
al 31 de diciembre. El temor fundado del personal activo es que esto sea el
preámbulo de despidos masivos, como ocurrió ya en el Complejo Petroquímico
Pajaritos de Coatzacoalcos, Veracruz.
MÉXICO, D.F.
(Proceso).- La intención de “redimensionar la plantilla laboral sindicalizada”
en todos los centros de trabajo y producción de Petróleos Mexicanos (Pemex),
prevista en el convenio administrativo 10717/2013, se tradujo ya en despidos.
El director de la
paraestatal, Emilio Lozoya Austin, y el secretario general del Sindicato de
Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), Carlos Romero
Deschamps, firmaron dicho acuerdo durante la revisión del Contrato Colectivo de
Trabajo 2013-2015.
El jueves 2,
trabajadores petroleros en el Distrito Federal, así como en instalaciones
administrativas y de producción, incluyendo jubilados y viudas pensionadas, no
recibieron el pago catorcenal de fin de año. Una de las afectadas, María Dolores,
no había visto nada semejante en la paraestatal desde que comenzó a laborar en
ella en 1979:
“Normalmente la
empresa paga la catorcena los martes a quienes reciben depósito bancario en
Banamex y Bancomer, y los miércoles a quienes cobran en Santander, Scotiabank y
Banorte.
“La empresa emite un
calendario accesible a todos los trabajadores en el que marca los días
festivos, contractuales y obligatorios, así como las fechas del pago de nómina.
En el correspondiente a 2013 viene marcado como día de pago el martes 31 de
diciembre, y en las oficinas de Marina Nacional, nuestro centro administrativo,
ese día no hubo ningún depósito en ningún banco. Por todos lados se escuchaba:
‘no me depositaron’.”
Su padre, un
petrolero jubilado que radica en Toluca, Estado de México, le confirmó a María
Dolores que no había recibido su pensión y le comentó que otros familiares
radicados en Salamanca, Guanajuato, también se quedaron sin pago.
“Todo me hace pensar
que el retraso de los pagos ha sido a nivel nacional y no por error bancario,
sino por otra causa imputable a Pemex. Si la falla hubiera sido en uno o dos
bancos podría pensarse que es responsabilidad de las empresas bancarias, pero
cuando sucede en absolutamente todos los bancos y en distintas ciudades, se convierte
en un problema nacional”, señala.
Por esta razón, la
empleada exige a la paraestatal que aclare públicamente las causas del retraso
de los pagos a trabajadores activos y jubilados o pensionados. “¿Será parte del
proceso de la tan llevada y traída ‘reforma energética’ o el preludio de
atrocidades aún peores contra el gremio petrolero y el pueblo de México?
¿Cuándo despertará este pueblo adormecido que continúa calladito y sin chistar
mientras una y otra vez lo pisotean, escupen y laceran a su antojo nuestros
gobernantes?”, se pregunta.
Según publicó el
viernes 3 el periódico Reforma, en el estado de Hidalgo el Departamento de
Finanzas Pemex Corporativo envió a los directivos un memorando para informar
“que el 31 de diciembre del presente año se tendrá reflejado en calendario el
pago catorcenal con base en el artículo 22.1 del contrato colectivo vigente
modificado el día 24 de diciembre del año 2013 por la reforma energética. Se
llevará a cabo la liquidación de 3 mil trabajadores de planta de diferentes
áreas”.
Funcionarios de
Pemex y miembros del sindicato petrolero comenzaron a reunirse el 29 de julio
pasado para revisar el contrato colectivo 2013-2015. Las negociaciones
terminaron a principios de agosto, con nuevas reglas en la relación laboral.
Entre éstas, se
convino un incremento salarial de 3.99% para el personal sindicalizado y un
aumento de 4.13% al salario tabulado. Asimismo se aprobaron los convenios
administrativos sindicales 10717/2013 y 10716/2013, relativos a la
“productividad” y a “compromisos contractuales”, vigentes desde el 1 de agosto
de 2013 hasta el 31 de julio de 2015.
Se canceló el
Reglamento de la Comisión Mixta de Contratación 2011-2013 porque “cumplió su
cometido” y se elaboró otro como “anexo 6”, aumentándole al nombre “de Calidad
y de Productividad”, abreviado como Conamicap.
El anexo 7 del
contrato colectivo se refiere al Reglamento de la Comisión Nacional Mixta de
Reacomodo (CNMR) de personal de planta “que deban quedar disponibles debido a
la reducción de puestos y supresión de departamentos, así como el destino
laboral” para adecuar la organización, modernizar sus instalaciones o
simplificar los sistemas o medidas de trabajo a fin de incrementar la
productividad.
El artículo octavo
de este anexo especifica que si la CNMR no logra acuerdos sobre lo anterior,
“el asunto se turnará para su análisis y resolución a instancia superior, y
para el efecto serán el subdirector de la SRHRL (Subdirección de Recursos
Humanos y Relaciones Laborales) y el secretario general del STPRM quienes
resuelvan en definitiva”. Es decir, Romero Deschamps seguirá teniendo el
control de las plazas sindicalizadas.
Fragmento del
reportaje que se publica en la edición 1940 de la revista Proceso, actualmente
en circulación.
(PROCESO/ ROSALÍA
VERGARA/ REPORTAJE ESPECIAL/ 8 DE ENERO DE 2014 )
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