Rhode Island, EE.
UU.- Documentos relacionados con la congregación católica Legionarios de Cristo
fueron difundidos el viernes al público, en medio de una batalla legal en torno
a la donación de 60 millones de dólares que hizo una viuda anciana a la organización,
Gabrielle Mee.
“The Associated
Press”, “The New York Times”, “National Catholic Reporter” y “The Providence
Journal” buscaron que se levantara el secreto sobre los documentos. Un juez
accedió, aunque dio tiempo a la Legión para que pudiera solicitar la
intervención de la Corte Suprema estatal. La Corte Suprema de Rhode Island se
negó el jueves a demorar la entrega de los documentos.
El papa Benedicto
XVI tomó control de la Legión en 2010, después de que una investigación del
Vaticano determinó que su fundador mexicano, el ya fallecido Marcial Maciel,
había llevado una doble vida: había vejado sexualmente a seminaristas y tenido
tres hijos con dos mujeres. El pontífice ordenó una reforma radical de la
congregación y designó un delegado papal para supervisarla.
Entre los documentos
dados a conocer el viernes está la declaración de una amiga de Mee, Joanne
McKosker, quien relató que la viuda se mudó al centro de la Legión en Rhode
Island, y pasaron meses para que pudiera verla.
En 2001, cuando pudo
visitarla al fin, le pidió una donación de 5 mil dólares para una organización
antiabortista. Después de que Mee accedió a dar el dinero, McKosker recibió una
advertencia para que no volviera a visitar o a llamar a su amiga.
Jeanne Dauray,
sobrina nieta de Mee, atestiguó que la visitó sintiendo que “había algo que no
concordaba”. Por ejemplo, siempre tenía que haber alguien en la habitación
durante la visita.
Según ese
testimonio, un panel de la Legión prohibió también a Mee que visitara a su
hermana Fifi, quien falleció poco después en California.
Tras esa decisión,
“Gabrielle estaba visiblemente alterada”, dijo Jeanne Dauray. “Me apretaba la
mano, se aferraba a mi brazo y me decía, ‘estoy muy decepcionada. Entiendo que
ellos tienen que tomar esta decisión, pero estoy muy decepcionada. De verdad
quería ver a Fifi’”.
“Cuando tienes a una
gansa que pone huevos de oro, le cortas las alas y no la dejas salir de la
granja”, dijo en un documento judicial Bernard Jackvony, abogado de Mary Lou
Dauray.
Encubren fechorías de Maciel
El testamento de
Gabrielle Mee, que murió a los 96 años en 2008, es el centro de la demanda. La
nieta de Mee, Mary Lou Dauray, sostiene que su tía fue defraudada por la Legión
para que le cediera su fortuna. Su marido, ya fallecido, fue director del Fleet
National Bank, absorbido más tarde por el Bank of America.
El juez Michael
Silverstein falló en septiembre que Dauray no podía demandar, pero notó que
había evidencias de que Mee había sido persuadida indebidamente de dar su
dinero a la Legión. El abogado de Dauray, Bernard Jackvony, dijo el viernes que
los documentos difundidos demuestran un esfuerzo orquestado por dirigentes de
la Legión de recibir el dinero de Mee y de encubrir las fechorías de Maciel.
La Legión dijo que
sus acciones fueron correctas y honorables. Afirma que no ejerció ninguna
presión indebida sobre la decisión de la anciana y que las donaciones que
extendió a la congregación fueron por voluntad propia.
Entre los documentos
difundidos hay declaraciones de altos jefes de la Legión, incluso el reverendo
Anthony Bannon, que fue segundo de Maciel, y el reverendo Luis Garza, actual
titular de las operaciones de la Legión en América del Norte.
El reverendo Garza
detalla en los documentos por primera vez cómo confrontó a la amante e hija de
Maciel, a partir de octubre de 2006, después de sospechar, tras visitar a
Maciel en un hotel de Jacksonville, Florida, en junio de ese año y ver a las
dos mujeres ahí.
Se esconde bajo pseudónimo
Ambas mujeres
confirmaron la paternidad de Maciel, y Garza dijo que obtuvo el certificado de
nacimiento de la hija, en donde decía que el nombre del padre era José Rivas.
Posteriormente se supo que Maciel utilizaba el mismo pseudónimo con su otra
familia oculta, una mujer mexicana con quien tuvo dos hijos.
No obstante, Garza
dijo que nunca confrontó a Maciel sobre su doble vida y que no pensó que fuera
necesario compartir la noticia con la parte amplia de la membresía de la Legión
o con su movimiento laico Regnum Christi. Señaló que sólo informó al superior
de la Legión y a otros dos sacerdotes.
“No pensé en el
momento que el hecho de ser padre de un niño cambiaría de alguna manera la
forma en que necesitábamos comportarnos cara a cara con el padre Maciel o las
acciones que necesitábamos realizar”, dijo Garza en su declaración de 2011.
“Porque nosotros necesitábamos acatar indicaciones de la Santa Sede y además
porque había un asunto de privacidad y respeto por la madre y la hija”.
La Legión admitió a
los hijos de Maciel y las acusaciones de abuso sexual contra él hasta febrero
de 2009, aproximadamente un año después de su muerte.
El escándalo de la
Legión es significativo porque muestra cómo la Santa Sede hizo caso omiso de
manera intencional de acusaciones creíbles de abuso de parte de Maciel durante
décadas, mientras lo mantenía como un modelo de santidad ante los creyentes,
debido a que proporcionaba dinero y hombres con vocación al sacerdocio. El
escándalo, el cual ha manchado el legado del papa Juan Pablo II, es citado como
un ejemplo especialmente flagrante de cómo el Vaticano desatendió durante
décadas reportes sobre abuso sexual de sacerdotes debido a que líderes de la
Iglesia pusieron los intereses der la institución sobre los de las víctimas.
(ZOCALO/ AP/17/02/2013 - 04:05 AM)
http://www.youtube.com/watch?v=zqp0GAffu7A&feature=player_detailpage
ResponderEliminar