Además de las prórrogas otorgadas por el
ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa a la construcción de inmuebles en el
malecón Tajamar, hay otro proyecto que la administración del ex mandatario
avaló en Costa Mujeres, Quintana Roo, y que es ahora motivo de discusión por su
impacto al ambiente. Esta obra se suma a otros desarrollos inmobiliarios en esa
entidad que recientemente han generado repudio en el país, debido a que, con
permisos federales y estatales, están dañando irreversiblemente ecosistemas.
Grupo RIU tiene más de 12 inversiones
hoteleras en México. Foto: SinEmbargo, especial
Ciudad de México, 28 de enero
(SinEmbargo).— La cadena de hoteles española RIU inició el 8 de enero pasado un
trámite ante la Secretaría de Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para
construir un hotel en Isla Mujeres, Quintana Roo, que forma parte de uno de los
14 lotes de un plan maestro llamado Desarrollo Turístico Costa Mujeres (DTCM),
avalado el 24 de junio de 2011 por el Gobierno del ex Presidente Felipe
Calderón Hinojosa, y que de acuerdo con académicos, activistas y partidos de
oposición provocará serios daños al ecosistema de la zona.
MX RIUSA II, S.A. de C.V.,
filial de RIU México, solicitó a la Semarnat el otorgamiento de un permiso para
construir un nuevo complejo en una superficie de 162 mil 082.64 metros
cuadrados. La escritura pública número P. A. 84,516 Volumen 786/2015, de fecha
15 de diciembre del 2015, revela que el “Hotel Costa Mujeres”, como denomina al
proyecto, estará ubicado en la zona costera del Municipio de Isla Mujeres.
El Manifiesto de Impacto
Ambiental (MIA) presentado por esta empresa a la Semarnat reconoce que habrá
daño a la flora y fauna del sitio. En ese documento se identifican dos especies
de flora silvestre dentro de la categoría de “especies amenazadas”: la palmera
guano de costa y la palmera plateada mexicana; en cuanto a la fauna, también se
reconoce un daño en el área para la iguana gris y la lagartija escamosa de
Cozumel, una especie que además está sujeta a protección especial.
Al respecto, Antonio Lot Helgueras,
doctor del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México
(UNAM), dijo a SinEmbargo que la sola duda de que especies de flora y fauna
endémicas estén en riesgo por un proyecto inmobiliario es un un incentivo para
detener una construcción.
“No se puede ver de manera
independiente a una especie en particular, sino debe verse todo el ambiente en
conjunto. Si se modifica drásticamente el entorno de una especie de flora o
fauna lo más probable es que se generen distorsiones que provoquen su
desaparición”, explicó el especialista.
Pero el impacto ambiental
presentado para el proyecto de RIU será mayor, afirman especialistas. El Hotel
sólo ocupa uno de los 14 lotes hoteleros–residenciales que integra el Desarollo
Turístico Costa Mujeres, aprobado por la Semarnat durante el sexenio del ex
Presidente panista Calderón Hinojosa.
El DTCM consta de un terreno
de 381 hectáreas y se localiza en la colindancia con el camino costero al norte
de Punta Sam, en el Municipio de Isla Mujeres. Ahí, además del proyecto de RIU
se construirán un campo de golf de nueve hoyos, dos clubes de playa, una casa
club, un área de vívero, caminamientos, vialidades y glorietas. También 151
hectáreas se destinarán a la construcción de 6 mil 900 cuartos de hoteles, y
sólo 58 hectáreas se reservarán como áreas de conservación.
CALDERÓN, EL AMBIENTALISTA
El ex Presidente Felipe
Calderón se envolvió recientemente en una polémica por acusaciones de
activistas que lo señalan como corresponsable por el ecocidio realizado en el
Malecón Tajamar el pasado 16 de enero.
El Fondo Nacional de Fomento
al Turismo (Fonatur) informó el 26 de enero que las ampliaciones y
autorizaciones de Impacto Ambiental se dieron justamente durante la
administración de Felipe Calderón, en 2006.
Pero el ex Presidente se
deslindó de las acusaciones.
“La autorización de #Tajamar
fue 2/2005, 1.5 años antes de mi gobierno. Luego publicamos Ley que prohibía la
tala de mangle”, escribió en su cuenta Twitter .
Sin embargo, el mismo martes
a través de Twitter, el Fonatur se dirigió directamente al ex mandatario
panista para “enterarlo” de que las autorizaciones ambientales para el proyecto
Tajamar se otorgaron entre 2005 y febrero de 2006 [en el sexenio de Vicente Fox
Quesada], y que las prórrogas a su vigencia se dieron en 2009 y 2011 [ya en el
Gobierno de Calderón]. La dependencia federal, además, aclaró que las prórrogas
se otorgaron incluso después que el propio Calderón propuso modificaciones a la Ley General de Vida
Silvestre para proteger los manglares en México.
Ahora, de acuerdo con
documentos oficiales registrados en la Semarnat, el 24 de junio de 2011
–también durante el sexenio de Felipe Calderón– se avaló el plan maestro para
construir el Desarrollo Turístico Costa Mujeres, aun cuando en la Matriz de
Identificación de Impactos Ambientales de la Manifestación de Impacto Ambiental
(MIA), Modalidad Regional, se registraron 84 interacciones efectivas, de las
cuales 55 corresponden a impactos ambientales negativos, es decir el 65.47 por
ciento.
“La ponderación de impactos
ambientales obtenidos de esta matriz, indica que los componentes ambientales
mayormente afectados en términos de impactos negativos netos son la fauna 20.24
por ciento, el agua 17.86 por ciento y el suelo 16.67 por ciento”, cita la MIA.
Tan sólo las etapas de
preparación y construcción del proyecto abarcan, de forma correspondiente,
hasta el 34.54 y el 45.45 por ciento del
total de impactos negativos, mientras que la etapa de operación sólo el 20 por
ciento.
Previo a la presentación del
DTCM, el 9 de septiembre del 2010 hubo legislaciones que fueron resueltas en la
región durante el sexenio de Calderón que facilitaron la presentación de un
proyecto de tal envergadura con un valor de 1 mil 400 millones 419 mil dólares
en la zona (unos 25 mil 800 millones de pesos).
Una de ellas fueron los
lineamientos del Programa de Ordenamiento Ecológico Territorial, hecho público
en el Periódico Oficial del Gobierno del estado de Quintana Roo, el 9 de abril
del 2008, y el otro fue el Plan Parcial de Desarrollo Urbano de la Península
Chacmuchuch, publicado en el mismo medio, el 27 de diciembre de 2007.
Gráfica: SinEmbargo
“TRAJES A LA MEDIDA” PARA EMPRESARIOS
“Te puedo decir que todos los
ordenamientos territoriales de los últimos años no han sido de desarrollo
ecológico, sino sustentable. De esta manera han sido trajes a la medida para
los inversionistas, hechos por funcionarios de Gobierno y políticos“, denunció
Araceli Domínguez Rodríguez, presidenta del Grupo Ecologista del Mayab (Gema).
El DTCM colinda con la laguna
Chacmuchuch, lo que ha hecho a grupos de oposición manifestar su preocupación
por la contaminación en la zona que conllevarán las obras.
El predio se encuentra
inserto en un Sistema Ambiental Regional conformado por la Barra Litoral de
Chacmuchuch, en dónde el 52.96 por ciento está cubierto por humedales y
manglares costeros.
“El área donde planea
desarrollar está muy cerca de la laguna, que está en la parte de atrás, llamada
Chacmuchuc [de mil 859 hectáreas]. Hay especies protegidas que viven ahí, hay
presencia de mangle, uva de mar, palma chit,
especies protegidas por la NOM 059 de especies protegidas de Semarnat
del 2010”, explicó Gerardo García, encargado de difusión del Partido Movimiento
Regeneración Nacional (Morena) en Cancún.
(SIN EMBARGO.MX/ Juan Luis García
Hernández/ enero 28, 2016 - 00:05h)
No hay comentarios:
Publicar un comentario