“Probablemente
sea diputado: es una inspiración incidir en política pública. Tengo nombre
propio con credibilidad y es lo que vengo a defender. Televisa y yo ganamos.
Estoy deudo de pagar mis impuestos”.
Milenio
Hasta donde se podrá
ver y testificar —incluso por sí mismo—, este jovenazo, ex vocero del
movimiento ciudadano #YoSoy132, hace uso y disfrute de todas sus facultades
humanas, incluidas las contradicciones.
¿Me permite hacerle primero unas preguntas de rutina?
Adelante.
¿Edad?
23.
¿Peso?
Subí un poco, pero
idealmente 94.
Muy bien, sigamos: ¿hoy ha tenido alguna variación en
su estado de ánimo?
Sí, hoy estoy muy
emocionado por venir aquí al programa.
¿Se diría que es una persona normal?
Normal, no.
¿Por qué?
Porque no sigo los
patrones de conducta que establecen ciertos protocolos de los lugares en los
que estoy.
¿Astuto?
Trato de.
¿Inteligente?
Sin duda.
¿Delirio de grandeza?
No, para nada.
¿Líder de opinión, don Antonio?
Algunos dicen ello.
Simplemente soy un estudiante que participa en un foro de opinión.
Volvamos, ¿hoy despertó deprimido?
No, para nada.
¿Recuerda en este día cuántas veces ha sonreído?
Aproximadamente unas
diez.
¿Y cuántas veces se han reído de usted?
Hoy, creo.
¿Le molesta que se burlen de usted?
Sí, mucho.
¿Le molesta que no lo tomen en serio?
Sí, sí me molesta.
¿Suele enfadarse por cualquier cosa?
Por cosas muy
particulares, pero no por cualquier cosa.
¿Por ejemplo?
Por las
contradicciones que asumen que creen que tengo.
¿Qué se creen?
Que tengo
contradicciones, lo cual no es cierto.
¿Podría decirnos una?
Pues podría decir
que lo que estoy haciendo es incongruente.
Volvamos, ¿se midió el azúcar?
No, no me he medido
el azúcar.
¿Y los niveles de verborrea?
Muy altos.
Bien, ahora déjenos armar su expediente…
¡Adelante!
¿Es usted hijo único?
No, tengo un hermano
dos años menor.
¿Berrinchudo?
No, de hecho muy
silencioso hasta los dos años que empecé a hablar.
¿Babeaba?
Sí, de hecho creo
que babeo todavía cuando duermo.
Por cierto, ¿en su casa siempre le hablaron con la
verdad?
Siempre y de la
misma manera que lo hago ahora.
¿Nunca le mintieron?
No, jamás.
¿Alguien le dijo que la moral es un árbol que da
moras?
Sí, y por supuesto
que no le hice caso.
¿Qué entiende por rectitud moral?
Pues que existe una
congruencia...
¿Y ética?
La ética es los
principios en los que se basa ese comportamiento.
Detengámonos, ¿a qué edad conoció la traición?
A los… 17.
¿Por qué?
Mi mejor amigo
empezó a andar con mi ex novia.
¿Y a qué edad se inició sexualmente?
A los 19.
¿Con un hombre o una mujer?
Con una mujer.
En fin, sigamos,
¿tiene vida social?
Tengo mucha vida
social.
¿Qué hace, por ejemplo, cuando no está en las redes?
Leo, juego Xbox y
voy a la escuela.
¿Ha salido a sondear de viva voz qué opinan de usted?
No lo he hecho…
¿Siente que lo rechazan?
Naturalmente, pero
eso es parte de este trabajo de la exposición pública.
¿Le gusta que lo reconozcan por donde transita?
Me gusta que me
reconozcan por lo que se ha hecho bien y que se me reconozcan además lo errores
para enmendarlos.
¿Qué ha hecho bien?
He tratado de ser un
hombre de bien.
¿Algo que reclamar?
Para nada, siempre
todo que corregir.
¿Quisiera volver a ser el Antonio de antes?
Soy el Antonio de
antes, durante y después de cualquier contingencia que usted considere.
¿Y quién es ése?
Pues un chavo
comprometido con su país.
¿Ser joven lo disculpa todo?
Ser joven es una
cuestión simplemente cronológica, no lo disculpa de nada.
¿Alguna disculpa por ofrecer?
No.
¿Ni a los que creyeron en usted?
Si creyeron en mí,
simplemente por aparecer frente a una cámara por un discurso y ahora por ese
cambio de posición dejan de creer en mí, es una cuestión muy personal de ellos.
No me compete a mí convencerlos.
A distancia, ¿qué le
dejó el #YoSoy132?
Una experiencia
inigualable que ningún aula de clases me podría haber dado.
¿Usted qué hizo por el #132?
Hice todo lo posible
para poder llevar al #132 a un buen puerto, que eso es contralorías civiles que
pudieran incidir en políticas públicas. No se logró.
¿Trabajó para el Cisen?
Conozco gente que
trabaja para el Cisen, pero yo no.
¿Los engañaron?
No, se engañaron
muchos solos.
¿Los manipularon?
Mire, asumir que
alguien manipula es perverso. Yo en este sentido no manipulo ni soy
manipulable.
¿Le quedan amigos?
Sí, pocos, pero me
quedan.
¿De los 132, cuántos quedan?
Me quedó uno, pero
muy valioso.
¿Quién es Manuel Cossío?
Es un tipo que tuve
la oportunidad de conocer una vez, de quien no volví a saber hasta esta
situación de que era un infiltrado del Cisen.
¿De qué otras cosas nos tenemos que enterar todavía?
A su tiempo se
enterarán de muchas cosas, no está en mí revelarlas.
¿Por qué?
Porque yo no soy un
intérprete ni traductor de la realidad.
¿Pensar que desacreditó al movimiento es darse mucha
importancia?
Por supuesto, es
darme mucha importancia, la cual no me doy.
Vuelvo, ¿es verdad que estudió o ha estudiado ciencia
política?
Y no nada más eso,
también estudio relaciones internacionales.
¿En el ITAM?
En el ITAM, la mejor
escuela del país.
¿Ahí qué les están enseñando de la ciencia política?
Todo en términos de
método, verificación e implementación.
¿El oportunismo es una materia o una maestría?
El oportunismo es
una conducta de quien la ejerce, no es una materia curricular en el ITAM.
¿Quién le dijo que la congruencia no formaría su
carácter?
La congruencia forma
mi carácter y no sé usted a quién se refiere, porque es una cuestión que dicta
mi conciencia, no un tercero.
¿Quién le dijo que podía tener nombre propio sin
credibilidad?
Tengo nombre propio
con credibilidad, y de hecho es lo que vengo a defender.
¿Cómo vamos?
Muy bien, tranquilo.
¿Quiere correr?
No, correr no está
dentro de mi rutina deportiva.
¿Necesita un abrazo?
Fíjese que sí. Y si
me lo da al final del programa, no se lo negaría.
Responda solo lo que sepa, ¿para quién trabaja?
Para nadie… para mí
mismo.
Por cierto, ¿en qué pensó cuando dijo que Televisa lo
usaba como usted la usa?
Simple transacción
económica. Para una televisora que lo que trata es ganar dinero a partir de
publicidad, un espacio de opinión crítica le favorece. En ese sentido, Televisa
gana, y yo, utilizando mi libertad de expresión, también gano.
¿Cuánto le pagan?
Me pagan lo
suficiente para vivir una vida adecuada y mis necesidades de estudiante.
¿Y usted sí ha pagado sus impuestos?
De hecho, no. Estoy
apenas entrando en esto de la fiscalización y estoy deudo de pagar mis
impuestos.
¿Pagar impuestos no es un compromiso con la sociedad?
Es un compromiso;
sin embargo, existen diferentes regímenes fiscales que permiten que ciertos
actores físicos o morales puedan o no pagarlos.
¿Eso que lo escuche Azcárraga?
Eso que lo escuche
Azcárraga y las diferentes empresas que eluden fiscalmente las diferentes
cantidades de dinero que deben de pagar.
¿Como Azcárraga?
Como Azcárraga, como
FEMSA, como Coca-Cola....
Por cierto, ¿por qué dejaría de trabajar en Televisa?
Si en algún momento
se modificara lo que yo digo, mi libertad de expresión… eso sería una
motivación de rescisión de contrato.
Muy bien, sigamos descubriéndolo, ¿cuándo se reunió
con Enrique Peña?
Nunca me he reunido
con Enrique Peña.
¿Con qué otro político ha platicado en esto días?
En los últimos días
nada más con el senador Armando Ríos Piter.
¿Y con Osorio Chong?
Fíjese que no, a
Osorio Chong no tengo el placer de conocerlo.
¿No le ha dicho qué hacer?
A mí no me dice
nadie qué hacer más que los dictados de mi conciencia.
¿Y qué conversó con Salinas?
Mire, a Salinas yo
ni lo veo ni lo oigo.
Bueno, para concluir,
¿en dónde se ve en cinco años?
Estudiando un
posgrado en política pública.
¿Aún en los medios?
No lo sé, es
cuestión de ver cómo se va desenvolviendo mi participación.
¿Priista?
No, para nada.
¿Diputado?
Probablemente: la
incidencia directa en política pública es una inspiración.
¿Con qué fuerza política?
Con la que, si
llegase a suceder, uno tomara la decisión. No lo sé, así en el abstracto.
Hay tres partidos:
PRI, PAN o PRD…
Naturalmente no
sería con el PRI.
¿Líder de opinión, don Antonio?
¡Que no, que no soy
líder de opinión, soy un estudiante nada más!
¿Incomprendido?
Un poco, sí.
¿Frustrado?
Sí, también tantito.
¿No se siente un viejo joven?
No, de hecho espero
ser joven toda la vida.
¿Dónde cree que termine sus días?
Acompañado de la
mujer que amo.
A lo mejor termina
conduciendo un programa de entrevistas…
Sí es así, lo tendré
como maestro para que me diga cómo hacerlo bien.
(DOSSIER
POLITICO/ Milenio/ 2013-06-23)
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