La estrategia de la guerra contra el
narcotráfico fue lanzada en diciembre de 2006, con la participación de las
fuerzas armadas del país como principales protagonistas. Desde entonces, y pese
a los reclamos por los miles de muertos, desaparecidos y desplazados, la
política de seguridad no ha cambiado y los resultados son escasos. Las causas
que generan el narcotráfico como la desigualdad y la pobreza permanecen, pero
eso es justo lo que no ha cambiado en la estrategia en la que han metido mano
al menos 10 personajes. ¿Quiénes son los que llevaron a México a esta guerra
que no rinde frutos?
La violencia generada por los
enfrentamientos contra el narcotráfico han marcado la agenda de seguridad pública
del país en los últimos 15 años. Foto: Christian Serna, Cuartoscuro
Ciudad de México, 28 de junio
(SinEmbargo).– Vecino del mayor consumidor de estupefacientes del mundo, México
ha sufrido las consecuencias de ser productor y distribuidor de drogas. Los
enfrentamientos contra estos grupos criminales han dejado más de 70 mil
muertos, aunque otras fuentes, como León Panetta, Secretario de la Defensa de
los Estados Unidos, han asegurado que el número asciende a 150 mil.
La Junta Internacional de
Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) detalló en el 2013 que el 90 por ciento
de la cocaína que se traficaba hacia los Estados Unidos pasaba por México.
Los protagonistas no sólo son
los criminales o capos del narcotráfico. En 10 años también lo son los altos
funcionarios que decidieron lanzar la guerra y luego, aun cuando las cifras
mostraban la derrota, reforzaron una estrategia que de acuerdo con diversos
especialistas es fallida. Desde Vicente Fox Quesada hasta Enrique Peña Nieto,
cada Presidente ha prometido acabar con el problema de la violencia, pero ésta
no termina.
Y los costos también son
materiales: la Encuesta nacional de Victimización y Percepción sobre la
Inseguridad Pública (Envipe) expuso que en el 2014 la violencia le costó a
México 227 mil millones de pesos. Por su parte, el Banco Mundial refrenda que
la inseguridad le cuesta al México el 12 por ciento del PIB.
La corrupción ha carcomido al
Estado sostienen otras investigaciones, y el narcotráfico se aprovecha de eso.
“La existencia de un sistema
de procuración de justicia y de cuerpos policiales colapsados y corruptos son
factores que han favorecido la diversificación de la cartera de actividad
criminal de los carteles de las drogas”, cita un informe del Banco
Interamericano de Desarrollo.
Entonces, ¿quiénes son los
personajes que definieron la guerra contra las drogas?
VICENTE FOX QUESADA
Vicente Fox Quesada inició los esfuerzos
de confrontación contra el narcotráfico. Foto: Cuartoscuro
El ex Presidente Vicente Fox
Quesada ha criticado en diferentes oportunidades el combate al narcotráfico que
ha sostenido México. En marzo de este año calificó de inútil ante diversos
medios de comunicación la guerra contra las drogas, y la participación del
Ejército para combatir al crimen, durante un evento realizado en Monterrey.
Sin embargo, el gobierno del
político del Partido Acción Nacional heredó un problema de inseguridad
relacionado con la creciente aparición de cárteles como los Zetas y la Familia
Michoacana. Y al principio de su mandato convocó la Cruzada Nacional contra el
Narcotráfico y el Crimen Organizado que, según dijo, logró detener a más de un
millar de presuntos delincuentes.
Fox anunció la “madre de
todas las batallas”, que terminaría concretando su sucesor en el cargo, Felipe
Calderón Hinojosa: la guerra contra el narcotráfico. La gestión foxista estuvo
caracterizada por problemas para asegurar criminales. El 19 de enero del 2001,
Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, líder del Cártel de Sinaloa, se fugó de una
prisión de máxima seguridad en los primeros 50 días de su mandato. Y no pudo
ser recapturado sino hasta 13 años después.
En enero del 2007 la Comisión
de Seguridad Pública de la Cámara de Diputados apuntó que en el sexenio de Fox
hubo al menos 9 mil muertes relacionadas con el narcotráfico, reportó el diario
El Universal. Del total de decesos, la mitad sucedió en Michoacán, y Sinaloa,
junto con Tamaulipas, sumó el 30 por ciento del total.
FELIPE CALDERÓN HINOJOSA
El ex presidente de la
República Mexicana Felipe Calderón Hinojosa ha dicho que no había otra opción
más que enfrentar al crimen. Foto: Isabel Mateos, Cuartoscuro
El 8 de diciembre del 2006,
el entonces Presidente Felipe Calderón declaró la guerra contra el narcotráfico.
La Secretaría de la Defensa detalló que 4 mil 260 elementos del Ejército
salieron a las calles, y se pusieron a disposición 46 aeronaves y 246
vehículos.
En ese momento más de 500
asesinatos habían ocurrido en menos de un año en Michoacán y el Gobierno
decidió desplegar más de 5 mil elementos a la entidad, bajo la Operación
Conjunta Michoacán, que pretendió disminuir los delitos en 16 regiones del
estado consideradas como de alta incidencia.
Sin embargo, la estrategia no
trajo la paz al país. Al menos 60 mil muertos dejaron la guerra contra el
narcotráfico de este sexenio, apuntaron medios independientes como el Semanario
Zeta, así periódicos del extranjero.
“Batallones de soldados mal
entrenados a las calles para luchar contra poderosas organizaciones criminales,
deja esta semana el campo de batalla después de seis años, con un saldo de al
menos 60 mil muertos por la violencia del narcotráfico y con su guerra
esencialmente en un punto muerto”, expuso The Washington Post, el 28 de
noviembre del 2012.
Ese mismo año, el Partido
Revolucionario Institucional (PRI) estimó en un estudio, titulado “Diez años de
panismo. Resultados”, que la lucha contra el crimen organizado emprendida por
Calderón costó 467 mil millones de pesos.
GENARO GARCÍA LUNA
Genaro Garcia Luna, ex Secretario de
Seguridad Pública Federal. Foto: Rodolfo Angulo, Cuartoscuro
El ex Secretario de Seguridad
Pública de Felipe Calderón Hinojosa contó con el mayor presupuesto asignado a
esa dependencia cuando aún existía, un monto de 184 mil millones de pesos. La
asignación, sumada a los malos resultados de seguridad, le valió numerosas
críticas de la oposición.
A García Luna se le atribuye
el desarrollo de políticas de la guerra contra el narco calderonista, donde
además de 60 mil muertos, hubo 27 mil desaparecidos. Varias de las acciones de
García Luna fueron catalogadas por la prensa de ser meras pantomimas derivadas
de su estrecha relación con televisoras. Destaca el caso de la francesa
Florence Cassez, detenida por secuestro en el 2005. Un acto que después sería
anulado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación al develarse que el
entonces Secretario simuló la captura frente a las cámaras. En enero del 2015
un Juez rechazó a Cassez una demanda por daños morales sufridos durante su
estancia de ocho años en prisión.
García Luna fue catalogado
por la revista Forbes como uno de los diez mexicanos más corruptos, en
diciembre del 2016. Con el fin del sexenio de Calderón, el ex Secretario se
mudó a una lujosa residencia de Miami, Florida. Forbes expuso sobre la gestión
de García que se caracterizó por un exceso de gasto para la auto-promoción”.
Más tarde, una investigación
periodística de Reporte Índigo reveló que el ex funcionario se había hecho
consultor inmobiliario, relacionado con la familia Weinberg, otros empresarios
de servicios de seguridad.
GENERAL GUILLERMO GALVÁN
Guillermo Galván, ex secretario de la
Defensa Nacional, justificó siempre la presencia de las tropas en las calles.
Foto: Rodolfo Angulo, Cuartoscuro
Guillermo Galván Galván
promovió la guerra contra el narcotráfico hasta el final del sexenio de
Calderón. Durante la conmemoración de la Marcha de la Lealtad en el 2012
aseveró que México se encontraba seriamente amenazado por el narcotráfico, un
discurso que justificó la participación del Ejército en la lucha contra el
crimen, opinan algunos.
La ineficacia del Ejército
desembocó en graves violaciones a los derechos humanos. La Comisión Nacional de
Derechos Humanos acumuló un total de 9 mil 228 quejas del Ejército, y 142 recomendaciones.
Galván estuvo cerca de ser
vinculado a actividades ilegales. Un escándalo se destapó después de que se
supiera que un General, de nombre Juan Manuel Barragán Espinosa, se ofreciera
para ser intermediario entre el crimen organizado y Galván.
De acuerdo con una
indagatoria de la Procuraduría General de la República, de número
PGR/SIEDO/UEITA/004/2012, iniciada tras una denuncia anónima al Ejército. El
cártel de Sinaloa pretendió la protección del Secretario a cambio de 140
millones de dólares.
EDUARDO MEDINA MORA
Eduardo Medina Mora, ex
Procurador General de la República tuvo un paso de controversias.
Foto: Enrique Ordoñez,
Cuartoscuro
El Procurador General de la
República durante la primera mitad del sexenio del ex Presidente Felipe
Calderón Hinojosa aseveró a 18 meses de su gestión que el Gobierno sería el
vencedor en la lucha contra las drogas.
“Aunque no lo parezca, vamos
ganando todos los mexicanos y vamos a ganar”, dijo en entrevista a Televisa.
“Hemos ido acotando el poder de las organizaciones, quitándoles poder de
fuego”, agregó.
Sin embargo, su gestión no
abonó a la erradicación del crimen organizado, de acuerdo con el informe de
Wikileaks, cuyas conclusiones detallaron que la rivalidad entre Medina Mora y
Genero García Luna, impidió un combate al narcotráfico efectivo.
Durante la gestión de Medina
Mora sucedió la tarjeta de la Guardería ABC, donde 49 niños perdieron la vida.
El caso no recibió sentencias hasta en mayo de 2014 en contra de 19 servidores
públicos. En el primer año del Gobierno de Calderón La PGR sumó la segunda
mayor cantidad de quejas en la CNDH, 671.
En el 2011 se dio a conocer
un informe elaborado por el Gobierno de los Estados Unidos en el que resalta
que Medina estaba enterado de las operaciones de tráfico de armas hacia México
que las autoridades del vecino país realizaban para detectar criminales. Sin
embargo, señala el informe el ex Procurador no cooperó lo suficiente.
MARGARITA ZAVALA
Margarita Zavala escudó a su esposo ante
los señalamientos de equivocarse en cuanto a su estrategia antidrogas.
Foto: Cuartoscuro
Ahora, aspirante
presidencial, la ex Primera Dama Margarita Zavala no sólo afirmó sus
intenciones de correr por la presidencia en el 2018, también reconoció en enero
de este año que el crimen organizado se infiltró en los partidos políticos
“desde hace tiempo”.
Junto a su esposo, Felipe
Calderón Hinojosa, Zavala desempeñó diversas tareas públicas y en eventos
públicos representó la cara amable del Gobierno panista al ser ella quien se
reunía con las víctimas de la guerra contra el narcotráfico.
Sin embargo, Zavala no ha
reconocido, como sí otros panistas, que la guerra contra el narcotráfico fue un
error. “Los Gobiernos, en todos los niveles, tenemos que actuar al ritmo de la
urgencia que se necesita y ver un poquito más allá que la propia elección
inmediata, ver hacia adelante”, dijo a EFE el año pasado.
Cuestionada de si se debieron
haber depurado las fuerzas armadas antes de sacarlos a las calles, Zavala
contestó que la urgencia del país para actuar fue mayor a la velocidad que
hubiera conllevado un proceso así. “Lo que no puede decir un Gobierno es ‘no
respondí porque no supe, no quise o me dio miedo”, dijo.
Sin embargo, su posible
candidatura acarrea el recuerdo de ese Gobierno que dejó miles de muertos. En
el 2012, Leon Panetta, Secretario de la Defensa de los Estados Unidos afirmó
que autoridades mexicanas endilgaron la muerte de 150 mil personas a la lucha
contra los cárteles.
ENRIQUE PEÑA NIETO
Enrique Peña Nieto, Presidente de la
República, protagonizó episodios como la fuga de “El Chapo”.
Foto: Adolfo Vladimir, Cuartoscuro
En los últimos tres años han
muerto en México 58 mil 523 personas asesinadas, de acuerdo con el Instituto
Nacional de Estadística y Geografía. Organizaciones civiles como Semáforo
Delictivo han expresado que al menos seis de cada diez son relacionadas con el
narcotráfico.
El Gobierno del Presidente
Enrique Peña Nieto ha fracasado en su intento por reducir el número de
víctimas, y críticos han apuntado que el cambio ha sido meramente en el
discurso del mandatario.
El 19 de abril el Presidente
mexicano anunció ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) un decálogo
sobre la lucha antidrogas. Ahí Peña abogó por el uso medicinal de la mariguana,
el aumento en el gramaje de portación de cinco a 28 gramos. Propuestas que
quedaron detenidas en el Senado.
El 11 de julio del 2015 el
capo Joaquín “el Chapo” Guzmán volvió a fugarse de un penal de máxima
seguridad. No fue sino hasta seis meses después que se logró su recaptura. Y el
aumento de casos de averiguaciones por el tráfico de drogas aumentó en un 48
por ciento.
MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG
Diversos cárteles han aparecido en los
casi cuatro años del actual Gobierno federal. El Secretario Gobernación, Miguel
Ángel Osorio Chong, es el encargado de la estrategia de seguridad en México.
Foto: Saúl López, Cuartoscuro
El Secretario de Gobernación
de Enrique Peña Nieto reconoció que la llamada guerra contra el narcotráfico
partió de un diagnóstico equivocado. Sin embargo, centros académicos como el
Instituto Baker en Texas han asegurado que la política del actual Presidente
sólo fue una continuación “maquillada” de la anterior. Esta administración ha promovido
la fuerza contra las drogas. Este Gobierno asevera haber capturado a 94 de 122
líderes del narcotráfico.
Años atrás, Miguel Ángel
Osorio Chong enfrentó diversas acusaciones en el 2005. La Procuraduría General
de la República (PGR) lo investigó por su presunta protección a Los Zetas;
posteriormente se dijo que él y sus hermanos realizaron millonarias
transferencias a Panamá a través del banco HSBC.
De acuerdo con una entrevista
ofrecida por el funcionario en enero a La Jornada, el narcotráfico está desdibujado
en México. Y se jactó de la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Sin embargo, cárteles como
Los Rojos y el Cartel Jalisco Nueva Generación han ganado terreno por
operaciones ilícitas que se han diversificado, como la extorsión y el
secuestro. En Michoacán han aparecido narcomantas de nuevas células delictivas
que e hacen nombrar La Nueva Familia, Los Justicieros y Los Blancos de Troya.
SALVADOR CIENFUEGOS
El General Salvador Cienfuegos ha
protegido a sus soldados para que no rindan declaración en el caso de
Ayotzinapa. Foto: Cuartoscuro
En octubre del año pasado, el
Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad
Hussein, sugirió a México sacar al Ejército de las calles.
Y pese a que el Secretario de
la Defensa Nacional (Sedena), Salvador Cienguegos Zepeda, ha dicho que
preferiría que los soldados regresen a los cuarteles, él no ve a otro cuerpo de
seguridad cumpliendo con la labor que realizan para combatir al narcotráfico.
Los soldados también han sido
señalados de cometer tortura. En abril pasado, Cienfuegos Zepeda se vio forzado
a pedir perdón por los malos tratos que recibió una mujer a manos de dos
militares en Ajuchitlán del Progreso, Guerrero. El video que se hizo público
correspondía a febrero del 2015.
En cuanto a las drogas, el
Secretario también ha confesado que su institución no ha estado capacitada
desde el principio.
“Hemos cometido errores, uno
de ellos fue cuando entramos de lleno al combate a las drogas, hacer un lado a
la policía, porque muchas policías estaban comprometidas y se habían corrompido
y entonces hicimos a un lado a las policías y nos quedamos con un problema que
no nos toca”, dijo en marzo al diario El Pulso de San Luis Potosí.
Al General Cienfuegos se le
han complicado los casos de Derechos Humanos. Uno de los más emblemáticos es
Ayotzinapa, un ataque a estudiantes perpetrado por miembros del crimen
organizado, de acuerdo con la versión oficial de la PGR, pero donde también
participaron policías. Cienfuegos no permitió que el Grupo Interdisciplinario
de Expertos Independientes (GIEI) que los soldados del Batallón 27 declararan
sobre lo sucedido la noche del 26 y 27 de septiembre del 2014, aunque hay
registros y evidencia de que, por lo menos, estuvieron todo el tiempo
informados de la cacería contra los jóvenes normalistas y no hicieron nada por
restablecer el orden.
(SIN EMBARGO.MX/ Juan Luis García
Hernández/ junio 28, 2016 - 12:04 am)
No hay comentarios:
Publicar un comentario