VILLAHERMOSA,
Tab. (proceso.com.mx).- El gobernador Arturo Núñez dio un ultimátum a
los policías para que regresen a sus labores y, a quienes no lo hagan,
se les despedirá y se lanzará una convocatoria para que jóvenes de entre
18 y 28 años se alisten como agentes.
El mandatario
estatal leyó un posicionamiento en Palacio de Gobierno en relación al
conflicto policiaco que hoy ajustó 14 días, en el que reiteró que el
paro laboral es “ilegal” y llamó a los uniformados para que se presenten
a trabajar, pues de ninguna forma, advirtió, “vamos a permitir que se
siga vulnerando la seguridad de los tabasqueños”
“Todo tiene un
límite en el marco de la ley”, señaló, y agregó que una vez que los
agentes se reintegren a sus labores, su gobierno seguirá abierto al
diálogo para mejorar sus condiciones laborales y de seguridad social,
con ausencia “de cualquier tipo de injerencia política indebida”.
“A
quienes no acudan al llamado, les informo que se desahogarán los
procedimientos administrativos y laborales correspondientes para
concluir con la relación de trabajo, por faltar de manera injustificada a
desempeñar las actividades para las que en su momento fueron
contratados”, anunció Núñez.
Y convocó a los jóvenes, hombres y
mujeres de entre 18 y 28 años, con estudios mínimos de bachillerato
terminado y con ganas de servir a Tabasco, a que, conforme a la
convocatoria próxima a publicarse, “se inscriban en el proceso de
selección para ser parte del nuevo rostro de la policial estatal”.
“Vamos
a seguir con el proceso de reforma policial, el cual se enmarca en los
esfuerzos que se están realizando en todo el país dentro del Sistema
Nacional de Seguridad Pública, para contar con una Policía Acreditable,
consistente en una policía profesional, más confiable, mejor equipada,
con un alto sentido ético, con vocación de servicio, sujeta a controles
de confianza y con horarios homologados (de 24 x 24)”, manifestó.
Detalló
que en 14 días de paro, su secretario de Gobierno, César Raúl Ojeda
Zubieta, ha acudido a siete reuniones para atender sus demandas
laborales, sin embargo, no se ha podido avanzar por los constantes
cambios de interlocutores y demandas, lo que refleja que su principal
petición “no está relacionada de ninguna manera con el mejoramiento de
las condiciones de trabajo de todos los policías, sino con el
apoderamiento de la corporación por unos cuantos”.
Recordó que,
desde un principio, dijo que su gobierno está consciente de la necesidad
de mejorar las condiciones no sólo de trabajo, sino de vida de los
policías, y es precisamente por este compromiso, “que creemos que el
gobierno no puede ceder ante la intransigencia y el chantaje”, resaltó.
“La
seguridad de la población no puede seguir siendo rehén de un grupo de
policías que anteponen sus intereses personales a su responsabilidad
pública en el cuidado de los tabasqueños”, señaló.
Destacó que
diversos sectores de la sociedad con quienes se ha reunido en los
últimos días, le han expresado su respaldo para continuar con las
acciones para contar con mejores cuerpos policiacos, y agradeció su
valor y lealtad a los policías que se mantienen activos, así como al
gobierno federal por su respaldo para garantizar la seguridad pública.
El
último encuentro entre líderes de los policías paristas el gobierno
ocurrió ayer viernes por la noche, luego de la que sostuvieron el jueves
que concluyó al filo de la medianoche.
Los representantes de los
uniformados se levantaron de la mesa y exigieron la presencia del
gobernador Arturo Núñez para reanudar el diálogo.
El gobierno se
había comprometido analizar un aumento salarial importante, lo mismo que
en prestaciones como vales de despensa y apoyo para comida, sin
embargo, “se echó para atrás” y dijo que el ajuste se haría hasta mayo
como cada año, denunciaron los policías.
El secretario de
Gobierno, Raúl Ojeda, informó que tras los avances del jueves y la noche
del viernes, los policías llegaron en una posición “intransigente” y
exigieron 100 por ciento de aumento salarial y en prestaciones, lo que
no es posible por las menguadas finanzas públicas.
Isabelino León,
uno de los líderes de los policías inconformes, dijo que están
dispuestos a regresar al trabajo pero con mejor salario, pues la mayoría
de los uniformados del país ganan entre 16 y 18 mil pesos mensuales, y
los de Tabasco entre 6 y 8 mil pesos.
/ 29 de marzo de 2014)
No hay comentarios:
Publicar un comentario