MONTERREY,
N.L., (apro).- La Procuraduría General de Justicia de la entidad (PGJE)
presentó hoy a una célula de Los Zetas implicada en el homicidio de 22
personas –12 hombres y 10 mujeres–, 17 de los cuales fueron incineradas
en dos ranchos ubicados en la zona norte.
Jorge Domene Zambrano,
vocero de Seguridad Pública, detalló que uno de los ranchos lleva el
nombre de “La Barbie” y el otro se encuentra en la presa San Martín, a
220 kilómetros de la capital, en el extremo norte de Nuevo León.
Domene
informó que dos de los detenidos, que ya fueron arraigados, hacían
trabajo de sicarios. Se trata de Jesús Guadalupe Frías Mendoza o Jesús
Alejandro Frías Lozano, El Lupín, El Gordo, El Cochiloco o La Vaca, de 19 años, y Mario Vázquez Ramírez, El Chéster, de 20, quienes recibían 6 mil pesos por quincena.
Los otros tres detenidos operaban como “halcones”. Son: Carlos Arturo Bazaldúa Escalante, El Anáhuac o El Arturín, de 26 años; Ezaú Alejandro Saldaña Olvera, El Tao, de 29; y Francisco Javier Sánchez Robles, Chacho, de 32.
Al momento de la detención, el jefe de “halcones”, identificado con el sobrenombre de Eru, alcanzó a huir.
Según
Domene, los crímenes cometidos por los zetas fueron efectuados entre
los meses de abril y agosto de este año, y sus víctimas eran residentes
de Anáhuac. Unos fueron eliminados por vender droga a grupos rivales y
otros por soplones.
La PGJE los implica también en robo de autos a
mano armada en contra de por lo menos cuatro conductores que circulaban
por ese municipio fronterizo con Texas.
En total, la célula cuenta con cuatro denuncias formales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario