Para exigir que se dé
cumplimiento a las promesas de dotar de servicios e infraestructura en sus
comunidades, un grupo de tarahumaras se plantó en la plazuela Obregón.
Delfino García Aldana,
vecino, originario de Cuitaboca, comunidad
que alberga estas comunidades, comentó que son carreteras, servicio de
salud y vivienda, algunas de las
necesidades que aún existen y no se ve para cuándo vayan a ser atendidas.
José Román Rubio López, líder
social de la Central de Organización Campesinas y Populares (Cocyp), declaró
que los 47 tarahumaras, hombres y mujeres, que se manifiestan, son parte de los
5 mil que habitan en la franja que colinda con Chihuahua, en una pobreza
extrema y marginados.
Rubio López, proveniente
del municipio de Sinaloa, dijo que
acompañaba al comisario municipal,
Saturnino Alcantar García para pedir a las autoridades el cumplimiento de las
promesas hechas hace ya un año.
“Se viene a recordarle al
señor gobernador las demandas de carreteras de Sinaloa de Leyva, que es la
cabecera del municipio de donde viven ellos, que sirve para entrar, en carro
son aparentemente 75 kilómetros, pero hay otros tantos kilómetros para llegar a
las comunidades de donde provienen”, expuso.
Son 62 comunidades que están
asentadas en el ejido Cuitaboca, agregó.
“Se está demandando
carretera, atención de salud, hospital, maestro bilingüe tarahumara y vivienda,
esos cuatro aspectos fundamentales son los que se están demandando”, detalló.
Se ha platicado no menos de
tres veces con el gobernador, dijo, otras tantas veces con Gerardo Vargas
Landeros, Secretario General de Gobierno, e infinidad de veces en la Dirección
de Asuntos Indígenas del gobierno del estado, con Sedesol federal y la estatal,
donde la Cruzada Contra el Hambre sólo son varios litros de saliva y varios y
tinta, porque no ha llegado este beneficio.
“Venimos a eso, a que el
gobernador y los funcionarios comprendan, entiendan que son hermanos, seres
humanos, ciudadanos mexicanos,
sinaloenses, aunque muchos de ellos no
tengan acta de nacimiento, hasta este momento, pero aún y con eso, ellos
merecen ser tratados y respetados por una autoridad y por nosotros como se lo
merecen y como nos los merecemos cualquier ser humano”, asentó.
La exigencia al cumplimiento
de los compromisos va más allá de las promesas de palabra, los manifestantes
esperan que las autoridades lo hagan por escrito, pues están decepcionados de
los funcionarios que no resuelven sus peticiones, y de, gobernador, señaló, que
se dice ser del municipio.
El plantón se mantendrá de
manera indefinida, indicó, hasta que las autoridades, incluyendo a los
diputados federales y senadores, den una respuesta.
“Porque queremos que ellos se
comprometan, para este año ya no, es difícil, pero para el próximo año, con un
presupuesto debidamente etiquetado por parte del congreso, pero también por
parte del congreso local, que también los 40 diputados no han atendido”,
señaló.
La prueba de la indolencia
está reflejada en los documentos que se han dirigido a todas las autoridades,
expuso.
(RIODOCE/ REDACCIÓN / 15 MAYO, 2016)
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