Encerrados
y con un gran contingente de seguridad alrededor, se reunió el subsecretario
Luis Enrique Miranda Nava con líderes del movimiento.
A
puerta cerrada, sin acceso a la prensa, y con un gran dispositivo de seguridad
federal, se desarrolló el encuentro entre los líderes de los jornaleros en San
Quintín y el subsecretario de Gobernación
Luis Enrique Miranda Nava.
En
la reanudación de la mesa de diálogo también estuvo el gobernador del Estado,
Francisco Vega de Lamadrid, senadores y diputados, así como funcionarios
estatales.
Por
tres horas se sostuvo la discusión entre los trabajadores y funcionarios. Al
finalizar el encuentro, el subsecretario de Gobernación anunció -de forma
apresurada- que en un plazo de 15 días habrá una nueva reunión después de
aplicar una exhaustiva inspección a todas las empresas agrícolas establecidas
en el Valle de San Quintín.
Después
el funcionario federal salió por la puerta trasera del salón del Hotel Misión
Santa Isabel, junto con el gobernador, así como el resto de funcionarios y
legisladores.
En
el último momento un líder de los jornaleros le gritó "¿Y el aumento
salarial?", a lo cual el subsecretario de Gobernación sólo se volvió
brevemente para responder vagamente: “En 15 días habrá una respuesta”.
Mientras
tanto por la Carretera Transpenínsular y hasta el Centro de Gobierno en San
Quintín habían marchado alrededor de 9 mil manifestantes quienes exigían una
respuesta y aceptaron de mala gana cuando después de 4 horas de reunión sus
líderes, les notificaron que aún no había respuesta del Gobierno sobre el aumento
salarial.
Con
los ánimos exacerbados por parte de los jornaleros y familias enteras reunidas
en torno a la protesta, los líderes tuvieron que calmar los ánimos e insistir
que la manifestación es pacífica y que no importaba esperar 15 días más “si ya
hemos esperado 20 años”.
Los
líderes reprobaron la ineptitud del gobernador, los funcionaros federales,
Gobernación, así como diputados y senadores, quienes siguen sin dar respuesta
concreta, por lo que continúa latente un boicot económico internacional.
Para
esto, los líderes de la Alianza de Organizaciones Nacional, Estatal y Municipal
por la Justicia Social cuentan con el respaldo de diversos organismos y
asociaciones distribuidos en México, Estados Unidos y otros países.
“Entonces
sí el gobierno se dará cuenta de las graves repercusiones de nuestro paro”,
sentenció Fidel Sánchez.
(SEMANARIO
ZETA/ GENERALEZ/ JUAN CARLOS DOMÍNGUEZ /
26 DE ABRIL DEL 2015 A LAS 13:31:21)
No hay comentarios:
Publicar un comentario