Martín Alberto Mendoza
El reportero Marco Antonio Ávila García, encargado de la fuente policiaca del periódico “El Regional de Sonora”, fue privado de su libertad por cuatro sujetos armados con rifles de alto poder y el rostro cubierto con pasamontañas.
Estos hechos se suscitaron alrededor de las 16:10 horas, cuando Ávila
García, de 37 años de edad, se encontraba en un lavado de autos denominado
“Quihuis”, ubicado en calles Jalisco y Belem, en la colonia Municipio Libre.
El establecimiento se localiza a unos
cuatrocientos metros al norte de la Jefatura de Policía Preventiva y Tránsito
Municipal.
Hasta ese sitio llegó un vehículo, tipo vagoneta,
color azul marino y de modelo reciente del cual descendieron tres sujetos, cuyas
edades fluctúan entre los 25 y 30 años, mientras que el otro individuo se quedó
al volante.
Antes de esto, Ávila García se encontraba secando
el vehículo Atos, modelo 2011, color blanco, que traía asignado para el
desempeño de su labor informativa.
Junto con él se encontraba un empleado del lavado
y lo encañonaron, y de esta forma lo dejaron estático para que no hiciera ningún
movimiento que atrajera la atención de las demás personas y llamaran a las
autoridades policiacas.
Y al iniciarse las primeras pesquisas, se
estableció que dos traían cubierto el rostro y otros dos no, pero los tres que
descendieron de la vagoneta portaban rifles AK 47, quienes no dieron tiempo de
reaccionar.
Frente al lavado de autos se encuentra un gran
solar baldío, lo que facilitó las cosas a quienes se llevaron al reportero con
alrededor de 15 años en la fuente policiaca, mismo que también trabajó como
corresponsal del ya desaparecido diario estatal de Sonora, El Independiente,
como fotógrafo.
Desde la desaparición el 2 de abril de 2005, de
Alfredo Jiménez Mota de 24 años de edad de Hermosillo, quien hacía reportajes
especializados de la fuente policiaca en El Imparcial, no se presentaba una
situación de esta naturaleza.
No obstante desde entonces periodistas de
distintos medios han sufrido agresiones, amenazas y han sido asesinados.
La comunidad periodística del Municipio de Cajeme
se encuentra consternada por la desaparición del comunicador Marcos Antonio
Ávila García y esperan que sea regresado con vida a su hogar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario