Tiró la toalla por "motivos
personales".
La renuncia de Javier Garay Sánchez,
presidente del Consejo Electoral, sacudió al Instituto que dirigía. Elegido por
un periodo de siete años, Garay no duró ni dos. Los argumentos de su salida,
dijo, son personales. Pero algunos factores y conflictos que no supo manejar,
pudieron orillar al consejero rumbo al desempleo electoral
Todavía el martes 6 de julio,
el presidente del Consejo Electoral, Javier Garay Sánchez, convocó a unas reuniones
privadas, para el día siguiente. Nunca se dieron. Ese miércoles al medio día,
frente a reporteros en Mexicali, anunció su salida definitiva del Instituto
Estatal Electoral.
¿Hubo algo de la noche a la
mañana que lo orilló a renunciar? O ¿sus reuniones agendadas para ese día
tenían el objetivo de anunciar su salida? A decir de sus propias palabras y
versiones de fuentes cercanas consultadas por ZOOM POLÍTICO, Garay tenía tiempo
pensando en su separación del cargo.
No se puede perder de vista
que el cargo de Garay era el de mayor jerarquía en el Consejo Electoral y el de
mayor duración, pues fue elegido por el Instituto Nacional Electoral (INE) para
un periodo de siete años ininterrumpidos.
El anuncio de Garay Sánchez
fue inesperado para todo el personal del Instituto, sin embargo, existieron
algunos síntomas en los últimos meses que pueden considerarse el preámbulo de
su renuncia.
Informantes de ZOOM alertaron
que, desde el pasado abril, Garay Sánchez había viajado a la Ciudad de México,
buscando audiencia con el presidente del Consejo Electoral del Instituto
Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova. El objetivo era presentar su
renuncia ante la máxima autoridad en la materia y el representante del Consejo
que lo eligió en 2015.
De acuerdo con personas
cercanas a Garay, Córdova le hizo ver que no era el momento para una renuncia,
dado que los procesos electorales del Estado de México, Coahuila, Veracruz y
Nayarit, estaban en puerta. Garay regresó a Baja California con su renuncia
hecha, pero sin ser aceptada.
A pesar de que los comicios
se libraron en junio, vinieron las impugnaciones en aquellas entidades y los
acuerdos para las designaciones de los titulares de área en el Instituto
Estatal Electoral de Baja California.
Una vez con las designaciones
de los nuevos directivos (la semana pasada), Garay finalmente tiró la toalla.
El tema personal y familiar
fue la explicación del presidente consejero, quien se separará definitivamente
hasta el 17 de julio. Sin embargo, se sabe que tenía residencia en Tijuana,
esposa e hijos menores, radicados en esta ciudad, pero su responsabilidad
pública en Mexicali pudo generar un desgaste familiar.
En un segundo plano, Garay
tiene empresas en Tijuana, de hecho, es uno de los reclamos comunes entre sus
malquerientes, pues la mayor parte del tiempo se la pasaba fuera de la capital
del estado, atendiendo asuntos de sus actividades privadas. El ponderar sus
negocios particulares pudo ser otra de las causas en las que Garay, no abundó.
Y por otro lado, existía una
tensión fuerte en su relación con algunos consejeros electorales, quienes le
cuestionaban sus decisiones, sus ausencias, incluso, los oficios de poca
importancia que firmaba.
Es de conocerse que la
relación de Garay Sánchez en el Consejo no era la mejor. De hecho, había roces
muy fuertes con cuatro consejeros: Rodrigo Martínez Sandoval, Bibiana Maciel
López, Graciela Amezola Canseco y, principalmente, con Daniel García García.
Por último, a finales de
junio, un video lo señalaba como socio de Emilio Vilaso Camesell, a quien
identifican como “operador financiero” de Juan Manuel Gastélum, alcalde de
Tijuana. Lo cual, Garay señaló a ZOOM que eso no era cierto.
Sin embargo, el video,
supuestamente de los activistas cibernéticos Anonymous, declaró a Garay como
socio en los negocios de pago de nóminas del Ayuntamiento y del propio
Instituto Electoral, exhibiéndolo, junto a su esposa e hijos, en fotos con
Vilaso y su familia. Además, se le atribuye una relación con Jaime Rogozinski
(que también negó), en el contrato de arrendamiento de camiones de basura y de
patrullas, por más de 250 millones de pesos.
El video fue publicado como
“Filtramos correos y documentos que vinculan al Operador Financiero del #PATAS
con el presidente del Instituto Electoral de BC; en fraude y peculado”. El
supuesto fraude al que hace referencia el material, es el relacionado a Julián
Leyzaola, quien fue reconocido como el segundo lugar en las elecciones del 2016,
en Tijuana, y quien obtuvo 1.4 puntos porcentuales por debajo de Gastélum, el
actual alcalde panista.
“Tijuana ya se cansó y
ustedes van a caer”, remataba el video supuestamente de los activistas, que
además provocó que el gobierno municipal denunciara penalmente por
“conspiración” y “conminación a delinquir”.
Ni siquiera Daniel García -el
principal opositor de Garay– utilizó el video para cuestionar su presidencia.
El video tuvo poco impacto en el Instituto, pero pudo agregarle presión al
ámbito familiar de Garay.
Garay Sánchez dijo, ante los
reporteros, el miércoles 5 de julio: “Los motivos de esta renuncia obedecen a
motivos personales y familiares. Es motivo para mí de priorizar algunas cosas
referentes a mi familia y es el momento para hacerlo. La acción no es fácil, me
llena de pesar porque hay una ilusión al momento de ejercer este encargo, para
completar la ruta y poder hacer la diferencia como nos lo propusimos desde el
primer día en este Instituto Estatal Electoral”.
(SEMANARIO ZETA/ ZOOM POLÍTICO /ISAÍ LARA BERMÚDEZ /LUNES, 10 JULIO, 2017
12:00 PM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario