Tras
el ataque a la comandancia del municipio de Villagrán, aumentó a 7 el número de
policías muertos.
El
saldo del ataque a la comandancia de Villagrán, Guanajuato, aumentó a siete
policías muertos; la mañana de este sábado, sobre la carretera Panamericana,
fueron abandonados los cuerpos de los cuatro agentes secuestrados durante la
agresión armada.
Este
último hallazgo completa una serie de hechos violentos, en los que 10 elementos
de seguridad municipal perdieron la vida en diferentes ataques o bien, mediante
ejecuciones directas.
La
madrugada del 8 de diciembre, la Secretaría de Seguridad Pública de León
confirmó la muerte del oficial Martín Salinas Sánchez con su propia arma de
cargo y a manos de un presunto ladrón.
Según
el comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública, el homicidio del oficial
Martín ocurrió mientras atendía un reporte de allanamiento de morada y robo a
comercio en la zona rural de la ciudad. El oficial llegó hasta la calle Puerto
de Chetumal en la colonia Granjas Económicas y se dirigió a un taller de
reparación de tractocamiones, que estaba siendo allanado por un presunto
ladrón.
Tan
sólo horas después, la comandante de la policía preventiva de Irapuato, María
Sonia Arellano Mendoza, fue secuestrada junto con su esposo y su hijo. La tarde
del miércoles 11, fueron localizados sus restos en la brecha conocida como «La
Coyotera» en bolsas de plástico.
Horas
antes, el fiscal general de Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre, declaró que
la mujer y su hijo habrían sido puestos en libertad; sin embargo, a quienes
liberaron fue al esposo, también policía, y a su hijo.
De
acuerdo con información extraoficial, a un costado de los restos de la
comandante Sonia fue dejada una cartulina firmada por un grupo de la
delincuencia organizada. En agosto, la comandante María Sonia Arellano Mendoza
recibió el reconocimiento al Mérito Policial 2019.
El
12 de diciembre los ataques directos siguieron. Dos policías, uno en Celaya
otro en Irapuato, fueron atacados y asesinados a balazos.
En
el caso de Celaya, el policía primero Irving Urive Martínez fue acribillado
cuando conducía su motocicleta en la colonia Jardines, a las 6:20 de la tarde.
Testigos indicaron que el agente, que se encontraba en su día de descanso, fue
alcanzado por los ocupantes de una camioneta negra y le dispararon en repetidas
ocasiones.
Ese
día, minutos antes de las diez de la noche, un elemento de la policía municipal
fue asesinado a balazos en una tienda de abarrotes de la colonia Constitución
de Apatzingán.
Antes
de terminar el día, un comando armado atacó las instalaciones de la policía
municipal de Villagrán. Se confirmó la muerte de tres oficiales y el secuestro
de otros cinco, entre ellos un oficial calificador.
De
acuerdo con el parte policial, el hecho ocurrió cerca de las 7:55 de la noche,
cuando un convoy de tres camionetas con hombres armados llegaron y arremetieron
contra la fachada de la corporación ubicada en el Bulevar Luis Donaldo Colosio,
a escasos metros de la carretera Panamericana Celaya-Salamanca.
En
la agresión, los hampones lograron asesinar a dos oficiales, un hombre y una
mujer que se encontraban en el exterior, además de herir a otro policía que fue
trasladado a un hospital grave de salud, que finalmente también falleció.
Fuentes
al interior de la Dirección de Seguridad Pública confirmaron que los sujetos
ingresaron a la dirección y secuestraron a cuatro oficiales y un juez. Tras
este último hecho, se dieron a la fuga haciendo uso de las llamadas «estrellas
poncha llantas» para evitar que los siguieran.
La
mañana del viernes 13 de diciembre, los cuatro agentes secuestrados fueron
abandonados sin vida en la carretera Panamericana, justo en el entronque a las
carretera que conduce a las ciudades de Irapuato y Salamanca.
(ARISTEGUI NOTICIAS/ JAVIER BRAVO/
REDACCIÓN AN / ES/ DICIEMBRE 14, 2019 4:32 PM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario