Gavin Newsom, Gobernador de
California, alertó después de los dos sismos que sacudieron al sur de
California: “Es una llamada de atención para el resto del estado y otras partes
del país, para ser sinceros”.
La falla de San Andrés, la
más peligrosa del mundo, está “cargada y lista” para un gran terremoto.
Discurre por unos mil 300 kilómetros a través del estado de California, en
Estados Unidos y Baja California, en México.
Washington/California,
Estados Unidos, 7 de julio (EuropaPress/AP).– Los residentes del sur de
California están en alerta máxima después de que de un sismo de magnitud 7.1
grados sacudiera este viernes las comunidades cercanas al desierto de Mojave,
sólo un día después de otro sismo de magnitud 6.4 en la misma área.
El Servicio Geológico de
Estados Unidos (USGS) advirtió que otro terremoto de magnitud similar podría
ocurrir la próxima semana, mientras que las réplicas han ocurrido, en promedio,
una vez por minuto desde la noche del viernes.
California es propensa a los
terremotos, ya que se ubica sobre una serie de fallas, es decir, regiones donde
las placas tectónicas se unen. La mayor de ellas –y la potencialmente más
peligrosa– es la falla de San Andrés, que discurre por unos mil 300 kilómetros
a través del estado de California, en Estados Unidos y Baja California, en
México.
My BF’s mom’s pool in #Ridgecrest
#abc7eyewitness pic.twitter.com/bQgYf12hPd
— jessica (@dearjessikahhhh) July 6,
2019
La falla delimita la placa
norteamericana de la placa del Pacífico y es una de las más estudiadas del
planeta, ya que en su práctica se encuentra sobre la superficie terrestre. Sobre ella se asientan los enormes centros
urbanos de Los Ángeles, la segunda ciudad más poblada de Estados Unidos, y San
Diego, y 38 millones de personas que viven en sus inmediaciones.
CUESTIÓN DE TIEMPO
La parte media de la falla se
rompió hace unos 160 años y la parte norte en 1906, provocando el devastador
terremoto de 7.8 grados que destruyó gran parte de San Francisco en 1906 y dejó
más de tres mil muertos.
Sin embargo, lo que más
preocupa a los científicos es la sección sur de la falla, en la que no se ha
producido un sismo en cerca de 300 años, pese a que los registros geológicos
indican que es la causante de un gran terremoto con una periodicidad de unos
150 años, y en todo ese tiempo ha ido acumulando tensión.
7.1 magnitude #earthquake
#californiaearthquake
Scared for life! 😶 pic.twitter.com/HQXtALwKKd
— Akanksha (@srk_msd) July 6, 2019
En la Conferencia Nacional de
Terremotos celebrada en California en 2016, los científicos que participaron ya
advirtieron que la sección sur de la falla de San Andrés está “cargada y lista”
para provocar un gran temblor.
Another huge earthquake in Los Angeles!
#earthquake #LosAngeles #california pic.twitter.com/c7hVHLrNaN
— Max Graham (@maxgraham22) July 6, 2019
LA SECCIÓN SUR, LA MÁS TEMIDA
La falla de San Andrés se
divide en dos secciones, pero la que más preocupa a los científicos es la
sección sur de la falla, en la que no se ha producido un sismo en casi 300
años.
Un informe del Servicio
Geológico de Estados Unidos en 2008, advirtió que un terremoto de magnitud 7.8
en el sur de la falla de San Andrés podría causar más de mil 800 muertos, 50
mil heridos y 200 mil millones de dólares en daños materiales.
“La información con la que
trabajamos los científicos indica que el extremo sur de la falla de San Andrés
es en la que es más probable que se produzca un gran terremoto en los próximo
30 años”, señala a BBC Mundo Jennifer Andrews, sismóloga del Instituto de
Tecnología de California.
Preliminarmente no se
registran daños en California luego de terremoto 6.6 🚫https://t.co/9haowHo223 en desarrollo @panchosaavedra
pic.twitter.com/afq5hh3jpu— alerta de emergencia (@alertadesismo) july 4, 2019
SISTEMA DE ALERTAS
Para los expertos es
fundamental que las autoridades estadounidenses produzcan un sistema de alertas
de terremotos como los que se han establecido con éxito en Japón o México. Cuyo
sistema permite avisar a las autoridades y población de la llegada de un
temblor con hasta 40 segundos de antelación.
Just a little earthquake in LA
#earthquake pic.twitter.com/56Yx1kpfLP
— Jenny Kate 🛫 (@writernationjen) July 4, 2019
“Nuestros sistemas de alerta
de terremotos deberían ser mejores. No tenemos sensores en todos los sitios en
los que son necesarios. No tenemos una infraestructura robusta”, señala la
responsable de operaciones del Laboratorio Sismológico de Berkeley Peggy
Hellweg.
UNA LLAMADA DE ATENCIÓN
Los dos sismos que sacudieron
al sur de California deberían alertar a las personas de todo el país sobre la
necesidad de estar preparadas para desastres naturales, señaló el Gobernador
del estado el sábado, mientras las autoridades se mostraban aliviadas de que
los daños no fueron mayores.
El mandatario estatal Gavin
Newsom dijo que los gobiernos deben fortalecer los sistemas de alerta y crear códigos,
y los residentes deben asegurarse de saber cómo protegerse durante un
terremoto.
Earthquake rocking Las Vegas
pic.twitter.com/PtUg6X4vaB
— @Nightcam (@nightcam) July 4, 2019
“Es una llamada de atención
para el resto del estado y otras partes del país, para ser sinceros”, dijo
Newsom en conferencia de prensa para brindar actualizaciones sobre las labores
del estado para ayudar a la zona afectada por los sismos del jueves y el
viernes.
My dads liquor store in Ridgecrest (11
miles from the earthquake) 🥴 pic.twitter.com/4RC0mY3eha
— Zomo (@zomo_abd) July 4, 2019
El terremoto del viernes fue
el de mayor magnitud en el sur de California en casi 20 años. Las autoridades
expresaron su preocupación sobre la posibilidad de fuertes réplicas en los
próximos días, e incluso meses.
No se reportaron decesos ni
lesionados graves tras el sismo de magnitud 7.1, que afectó un área que se
extendió de Sacramento a México y provocó la evacuación de una base de la
Marina Armada en el desierto de Mojave.
El sismo se registró a las
8:19 de la noche con epicentro a 18 kilómetros (11 millas) de Ridgecrest, la
misma área donde apenas un día antes hubo otro sismo de magnitud 6.4.
Dejó edificios cuarteados y
en llamas, caminos dañados, ferrovías obstruidas y fugas en tuberías de gas y
agua.
Los pocos daños se debieron
principalmente a lo remoto del epicentro, pero el Gobernador Gavin Newsom que
el daño “es engañoso… No lo notas a primera vista”.
El mandatario estatal calculó
el impacto económico en más de 100 millones de dólares, y afirmó que el
Presidente Donald Trump le llamó para ofrecer apoyo federal para la reconstrucción.
“Está comprometido a largo plazo para ayudar a
respaldar las labores de reconstrucción”, dijo Newsom sobre el Presidente.
Sólo 28 mil personas viven en
la región de Ridgecrest, que se encuentra en medio de zonas más pobladas del
sur de California y del condado Clark, en el que se ubica Las Vegas. Pero los
sismólogos advirtieron que el área podría registrar hasta 30 mil réplicas en
los próximos seis meses.
April Hamlin, originaria de
Ridgecrest, dijo que “ya estaba en vilo” cuando se presentó el segundo sismo.
Ella y sus tres hijos pensaron que se trataba de otra réplica”.
“Pero empezó a sentirse más
fuerte”, relató. “La televisión se cayó y quedó colgada del cable. Escuchamos
cómo se rompía. Escuchamos vidrios rompiéndose en otras habitaciones, pero lo
único que pudimos hacer fue quedarnos donde estábamos hasta que terminó”.
Dada la posibilidad de
réplicas y de que las temperaturas alcancen los 38 grados Celsius (100°
Fahrenheit) en los próximos días, las autoridades tomaron precauciones.
La Guardia Nacional de
California enviará un contingente de 200 efectivos, apoyo logístico y
aeronaves, dijo el general mayor David Baldwin. El Pentágono ha sido
notificado, y todo el Departamento Militar de California está en alerta,
señaló.
La base Naval Air Weapons
Station China Lake publicó en Facebook que el personal no esencial fue evacuado
y que las operaciones se detuvieron. Los epicentros de ambos sismos se ubican
dentro de la base, y las autoridades dijeron que continuarán evaluando los daños.
La Oficina de Servicios de
Emergencia de California trajo catres, agua y comidas, e instaló centros para
refrescarse en la región, dijo su director Mark Ghilarducci.
La policía de caminos estatal
cerró un tramo de 48 kilómetros (30 millas) de la ruta estatal 178 entre
Ridgecrest y el poblado de Trona, al suroeste de Death Valley, debido a un
derrubio y a la presencia de cuarteaduras graves.
-Con información de John Antczak, Daisy
Nguyen y Marco José Sánchez
(SIN EMBARGO/REDACCIÓN / 09 DE JULIO 2019)